Alertas meteorológicos: cómo los clasifica el SMN y cuánto tiempo duran

El alerta meteorológico es un instrumento esencial para salvaguardar la seguridad de las personas frente a fenómenos climáticos extremos. Estas notificaciones proporcionan información crucial sobre las condiciones que podrían poner en peligro la vida y los bienes, permitiendo que la población y las autoridades tomen decisiones adecuadas y oportunas.

Pero realmente, qué es una alerta meteorológica, cuánto tiempo suele durar y cuáles son las clasificaciones establecidas por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de Argentina, que es la entidad encargada de emitir estos avisos.

¿Qué es una alerta meteorológica?

Se trata de un aviso emitido por organismos oficiales de meteorología, cuyo propósito es informar a la población sobre condiciones climáticas peligrosas que pueden afectar a ciertas zonas geográficas.

Estas alertas se basan en la predicción de fenómenos como tormentas, lluvias intensas, vientos fuertes, heladas, olas de calor y otros eventos climáticos que podrían ocasionar riesgos para la vida humana, la infraestructura y las actividades cotidianas.

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El alerta meteorológico incluye varias advertencias del SMN. (Foto Gentileza @diego_domi)

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) es el encargado de emitir estas alertas en Argentina. A través de su página web, aplicaciones móviles y otros canales de comunicación, pone a disposición de la ciudadanía información precisa sobre las condiciones climáticas que se prevé ocurrirán, así como recomendaciones para minimizar los riesgos asociados.

El tiempo de duración de estas alertas varía según la intensidad del fenómeno y la zona afectada, y son actualizadas constantemente para reflejar cambios en las condiciones meteorológicas.

¿Cuánto dura una alerta meteorológica?

La duración de una alerta meteorológica depende del tipo de fenómeno y de su evolución. En algunos casos, como en los eventos climáticos repentinos, la alerta puede durar pocas horas, mientras que en fenómenos de largo plazo, como olas de calor o tormentas que se prolongan, la alerta puede mantenerse durante varios días.

En cualquier caso, las alertas son siempre actualizadas en función de la información más reciente, lo que permite que las autoridades y los ciudadanos cuenten con datos oportunos para tomar las medidas necesarias.

El SMN tiene la responsabilidad de ajustar las alertas según los cambios en las condiciones meteorológicas, por lo que los tiempos de duración pueden verse modificados. Esto significa que, si un fenómeno se intensifica o disminuye, la alerta puede extenderse o cancelarse.

En este sentido, la población debe estar atenta a las actualizaciones periódicas y seguir las recomendaciones proporcionadas, como mantenerse informado sobre el estado de la alerta y tomar precauciones para evitar situaciones de riesgo.

Clasificaciones de las alertas del SMN

El SMN clasifica las alertas meteorológicas en tres categorías principales: alerta amarilla, naranja y roja. Cada una de estas clasificaciones refleja el nivel de intensidad del fenómeno meteorológico previsto y el riesgo que representa para la población.

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Se vienen varias tormentas.

A continuación, se detallan los distintos niveles de alerta y lo que implican para quienes se encuentren en las zonas afectadas:

1. Alerta Amarilla: fenómeno de baja a moderada intensidad

Se emite cuando se espera un fenómeno meteorológico que tiene una intensidad baja o moderada, pero que podría causar algún tipo de inconveniente o riesgo para ciertas personas, actividades o bienes. Aunque no es una situación grave, la alerta amarilla indica que las condiciones climáticas podrían ser desfavorables, por lo que es importante mantenerse alerta y tomar precauciones.

Las personas que se encuentren en zonas con alerta amarilla deben estar atentas a posibles cambios en el tiempo y actuar con precaución en caso de que el fenómeno se intensifique.

Por ejemplo, una lluvia intensa de corta duración o ráfagas de viento moderadas pueden generar condiciones peligrosas, aunque no se espera que causen daños significativos. Por eso es recomendable estar informado, seguir las indicaciones del SMN y no subestimar las condiciones climáticas, ya que el riesgo puede aumentar.

2. Alerta Naranja: fenómeno de moderada a alta intensidad

Es emitida cuando se pronostica un fenómeno meteorológico de intensidad moderada a alta, que puede representar un riesgo para la seguridad de las personas y sus bienes. En este caso, el SMN advierte que las condiciones climáticas son más severas y que las personas que se encuentren en la zona afectada deben tomar medidas más estrictas para protegerse.

Durante una alerta naranja, fenómenos como tormentas severas, vientos fuertes o lluvias intensas pueden afectar gravemente las actividades diarias. Además, es posible que haya interrupciones en los servicios básicos o daños materiales. Las autoridades locales pueden tomar medidas preventivas, como la evacuación de áreas específicas o la suspensión de actividades al aire libre.

Se recomienda seguir las instrucciones de seguridad emitidas por el SMN y las autoridades provinciales y municipales, y limitar las actividades en el exterior.

3. Alerta Roja: fenómeno de alta a extrema intensidad

Es la clasificación más grave emitida por el SMN. Se produce cuando se prevé un fenómeno meteorológico de alta o extrema intensidad, con un alto potencial de causar daños graves y poner en peligro la vida de las personas. Las condiciones meteorológicas en este nivel de alerta son extremadamente peligrosas, por lo que es imperativo que la población tome medidas urgentes para protegerse.

En estos casos, las tormentas violentas, inundaciones, olas de calor intensas o vientos huracanados pueden causar estragos.

Las autoridades locales suelen implementar medidas estrictas, como la evacuación de áreas de riesgo, la suspensión de actividades comerciales y escolares, y la restricción de circulación en ciertas zonas. La población debe seguir todas las recomendaciones de seguridad, evitar salir al exterior a menos que sea estrictamente necesario, y mantenerse en contacto con los canales oficiales de información.