La verdadera razón por la que nunca debes tirar el aceite usado por las cañerías

Una vez que se termina de cocinar, es común acumular los utensilios dentro de la bacha para lavar los platos. Incluso, muchas personas optan por tirar el aceite usado en la rejilla, algo que puede dañar directamente los caños de la cocina, como también al medio ambiente.

Hay varios motivos por los cuales no se debe arrojar el aceite sucio por las cañerías. La primera es que puede provocar daños severos en los principales conductos de la cocina, como también atraer la aparición de insectos y bacterias. Además, contribuye con la alta contaminación de ríos y mares.

¿Cómo afecta el aceite usado a las cañerías y el medio ambiente?

Tirar el aceite en la pileta puede traer serias consecuencias para todo el circuito de cañerías que tiene la cocina, como también para el medio ambiente.

Uno de los principales daños se lo llevan los ríos y los mares a los que llegan estos restos de aceite, ya que se trata de moléculas orgánicas apolares, es decir, no se mezclan con el agua. De hecho, los especialistas estiman que un litro de aceite puede contaminar hasta mil litros de agua.

El aceite usado que se arroja por la bacha termina formando una especie de película en la superficie de estos mares y ríos, lo que afecta directamente a la correcta respiración y reproducción de todos los seres vivos que habitan en el mar.

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¿Cómo afecta el aceite usado a las cañerías y el medio ambiente?

Guardar el aceite y utilizarlo nuevamente para cocinar no sólo evita que esto ocurra, sino que también reduce la gran cantidad de recursos naturales que se necesita para una nueva producción de este producto.

En cuanto a los daños que puede generar en las tuberías, tirar el aceite en la pileta de la cocina puede ser uno de los principales causantes de la contaminación del agua potable, como también fomentar el rápido deterioro de estos materiales.

Asimismo, no están preparados para contener los residuos de este producto, lo que puede generar obstrucciones y una posterior rotura de los caños, sumado a los malos olores que causa el agua podrida.

Qué hacer con el aceite usado

Ante esto, surge la duda de qué hacer con el aceite una vez que se terminó de usar para cocinar. Habitualmente, las personas optan por aceites vegetales de girasol, oliva, maíz, soja, canola y uva, entre otros. Para guardarlo, será fundamental colarlo y quitarle los restos de comida una vez que se encuentre frío.

Una vez filtrado, el siguiente paso será encontrar el recipiente adecuado para almacenarlo dentro de los cajones de la cocina. Preferentemente, se aconseja utilizar un envase PET (tereftalato de polietileno), es decir, en una botella de cualquier tamaño. Aunque no es el más recomendado, se puede optar por un envase de vidrio.

El aceite que va a parar a las cloacas obstruye el sistema y es contaminante. La Muni analizó alternativas.

Qué hacer con el aceite usado

Dos aspectos importantes son el lugar donde ubicarlo y qué puede tener cerca. Lo mejor es elegir una zona fresca y seca, preferentemente lejos de las fuentes de calor como las hornallas y el horno, y evitar mezclarlo con otros residuos orgánicos.

¿Cuántas veces se puede volver a usar el aceite?

Para guardar el aceite es imprescindible filtrar y dejarlo libre de residuos. Si bien no hay una cantidad exacta de veces en las que se puede volver a usar este producto, lo cierto es que cada vez tiene más probabilidades de juntar bacterias y aumentar su grado de deterioro.

Ante ello, será muy importante la opinión de cada uno y decidir para qué tipo de cocción se opta por el aceite reutilizado. Lo mejor es elegir algunos alimentos que requieran una leve capa de aceite para que no se pegue en la fuente una vez dentro del horno en lugar de hacerlo para freír de nuevo.

Cuando no sirva más, se puede llevar directamente a puntos de recolección específicos que hay y otros que ofrecen algunos comercios, o bien algunas empresas dedicadas exclusivamente al reciclaje. Incluso puede ser una gran alternativa para los talleres mecánicos, ya que puede servir para agilizar algunos procesos de reparación.