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La Mañana Real Madrid

Aura ganadora: Real Madrid dejó afuera al Atlético y va por otra Champions

Gallagher anotó el único gol de la noche a los 30' segundos y con un global de 2 a 2 el Colchonero mandó la serie a penales. En esa instancia, el Merengue prevaleció con mucha fortuna.

Serie apretada, definición atrapante y penales polémicos. Pasan los años, las circunstancias y Real Madrid sigue siendo, por lejos, el club más grande del mundo y de la Champions League. Después de ganar 2 a 1 en el Bernabéu, el equipo de Carlo Ancelotti cayó como visitante por la mínima en el Wanda Metropolitano, pero se impuso en la resolución desde los doce pasos.

Una serie más en la que los vestidos de blanco terminan pasando ante los dirigidos por el Cholo Simeone. El argentino Julián Álvarez fue protagonista en el penal que resultó decisivo en la serie, donde intervino el VAR.

Crónica de otra clasificación merengue

Atlético de Madrid pegó rápido con un gol a los 29 segundos. Fue anotado por Conor Gallagher, después de una jugada que inició Julián Álvarez y derivó en el desborde de Rodrigo De Paul. El centro a rastró del volante argentino fue capturado por el inglés que marcó el único de la noche e igualó la llave.

Un arranque ideal que favoreció al conjunto Colchonero, que fue superior desde el pitazo inicial.

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El gol de Gallagher del Atlético fue el segundo más rápido recibido por el Real Madrid en Champions. El primero fue el de Roy Makaay en 2007 con el Bayern a los 11 segundos. Esa eliminatoria también fue de 8vos, el Madrid venía con ventaja de uno del Bernabéu y terminó eliminado.

También fue el más rápido del Aleti en su historia en la competencia y el más veloz de un futbolista inglés en este torneo.

Pese al dominio de balón de la visita, las chances más claras fueron para el local. Julián Álvarez exigió a Courtois con dos remates fuertes, mientras que del otro lado las pelotas que agarró Oblak llegaron muy débiles a sus manos o fueron centros sin destino peligroso.

En medio de un muy complicado para Real Madrid, llegando a los 25' del complemento, Mbappé pudo filtrarse con todo su talento en la defensa rival. Después de dejar pagando a Giménez, fue derribado dentro del área por Clement Lenglet y el árbitro Marciniak cobró inmediatamente la pena máxima.

La ejecución de Vinicius fue insólita por cómo impactó la pelota y a donde la mandó. El brasileño tomó el balón con cara interna del pie derecho para la tomó muy abajo y la tiró lejísimos. Impropio de un jugador de primer nivel, parecido a lo que le pasó a Gonzalo Montiel en la última definición de River.

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El trámite estuvo lejos de ser un show de fútbol como otras series llenas de goles, pero sí cumplió las expectativas con momentos cargados de tensión y algunas llegadas.

Ingresaron Ángel Correa y Nahuel Molina, mientras que en el cierre del tiempo regular salió reemplazado De Paul, que realizó un gran despliegue.

El alargue

Entró muy bien Correa, que ya había tenido una clara en el final de los 90' y volvió a generar una situación el en inicio del tiempo extra con un gran control de zurda, pero su pase al medio fue rechazado por la defensa.

Entre piernas cansadas y cambios, los despejes y las infracciones dominaron la escena en casi todos los minutos del alargue.

Al Aleti le faltó precisión en los contragolpes y al Real en los ataques estacionados, algo que le pasó toda la noche. Algunos jugadores importantes como Bellingham y Vinicius tuvieron un partido muy flojo, sin influir en el partido.

Los penales

Mbappé abrió el pie derecho. Oblak al otro lado: 1-0.

Sorloth cruzó el zurdazo y Courtois quedó engañado: 1-1.

Bellingham, igual que Mbappé pero más fuerte: 2-1.

Julián se resbaló, le pegó fuerte al medio y anotó, pero la revisión del VAR determinó que golpeó la pelota con los dos pies y se lo anularon.

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Valverde abrió el pie derecho y Oblak no llegó: 3-1.

Correa remató de derecha a media altura, Courtois la tocó pero la pelota se metió: 3-2.

Lucas Vázquez anunció mucho, abrió el pie derecho y Courtois lo adivinó.

Marcos Llorente cruzó su derechazo, el balón pegó en el travesaño y salió.

Rudiger le pegó a media altura y Oblak adivinó, pero puso la mano muy floja y la pelota se metió igual. Clasificó el Real.

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