El clima en Neuquén

icon
15° Temp
51% Hum
La Mañana Petrona

La sopa Minestrone de Doña Petrona: una receta que abraza el alma

Con verduras, fideos y el toque único de Doña Petrona, esta sopa minestrone es pura memoria, sabor y calidez de hogar.

Si hay algo que nos atraviesa en el frío argentino, además del viento y la humedad, es la sopa. En cada casa hay una olla que se enciende como abrigo líquido, una receta que viaja de generación en generación. Y entre todas, la minestrone tiene su lugar asegurado. No por italiana, sino por adoptada. Por mestiza. Por sabrosa. Y si hay una versión de esta sopa que logró quedarse para siempre en la memoria colectiva, es la que enseñó Doña Petrona C. de Gandulfo.

La mujer que enseñó a cocinar a varias generaciones de argentinas —y argentinos también, aunque un poco más tímidamente— tenía ese don de convertir lo extranjero en algo familiar. Tomaba una receta del viejo mundo y la aterrizaba en el contexto criollo: lo que no se conseguía, se reemplazaba; lo que sobraba, se aprovechaba. Así, la minestrone que enseñó en su mítico “Libro de Doña Petrona” —ese volumen enciclopédico que sobrevivió a dictaduras, divorcios y mudanzas— no era exactamente la italiana, pero sí una versión potente, sabrosa y contundente, bien a la criolla.

sopa miestrone.jpg
Sopa Minestrone, un clásico que forma parte del recetario de Doña Petrona.

Sopa Minestrone, un clásico que forma parte del recetario de Doña Petrona.

Un plato que cuenta una historia

La minestrone es, en esencia, una sopa campesina. Nació en Italia como plato de pobres, de aprovechamiento, donde iban a parar las verduras de estación, las sobras de pasta y, si había suerte, algún hueso de jamón. Pero con el tiempo se volvió noble. Y como toda receta noble, cruzó el Atlántico y encontró hogar en las cocinas argentinas, donde se volvió estandarte del invierno.

Doña Petrona, con su estilo didáctico, la adaptó para que cualquier ama de casa la pudiera hacer con lo que tuviera en la heladera. No hacía falta ir a un mercado italiano ni conocer el nombre de las pastas en dialecto genovés. Bastaba con tener ganas de cocinar.

Y como todo lo que pasaba por sus manos, la minestrone de Petrona tiene algo que reconforta. No solo por sus ingredientes —que combinan lo mejor del mundo vegetal con la textura de los fideos— sino porque es un plato que se toma en ronda, que se sirve en fuentes grandes, que huele a cocina encendida y a conversación lenta.

La receta original de Doña Petrona (con alguna adaptación inevitable)

A continuación, compartimos la receta tal como la enseñaba Doña Petrona, con pequeñas actualizaciones para traducirla al lenguaje actual, pero respetando su espíritu.

Receta de Sopa minestrone al estilo de Doña Petrona

Rinde 6 porciones abundantes

Ingredientes

1 cebolla grande picada

1 zanahoria en cubitos

1 puerro en rodajas finas

1 rama de apio picada

1 papa mediana en cubos

1 taza de porotos blancos cocidos (pueden ser enlatados)

1 taza de arvejas (frescas o congeladas)

1 zucchini en cubitos

2 tomates perita pelados y picados (o 1 taza de puré de tomate)

100 g de fideos secos tipo coditos o moñitos

1,5 litros de caldo de verdura o agua

2 cucharadas de aceite

Sal, pimienta y orégano a gusto

Queso rallado para servir (opcional)

sopa minestrone Dona Petrona.jpg
La sopa Minestrone, ideal para los días frescos.

La sopa Minestrone, ideal para los días frescos.

Desarrollo

En una olla grande, calentar el aceite y rehogar la cebolla, el puerro, la zanahoria y el apio durante unos minutos hasta que estén tiernos.

Agregar los tomates picados y cocinar 5 minutos más, dejando que se deshagan un poco.

Incorporar el caldo caliente, las papas, el zucchini y las arvejas. Cocinar a fuego medio durante 15 minutos.

Añadir los porotos cocidos y los fideos. Continuar la cocción hasta que la pasta esté al dente (aproximadamente 8 a 10 minutos, dependiendo del tipo de fideo).

Salpimentar a gusto y sumar una pizca de orégano seco para perfumar.

Servir caliente, con un poco de queso rallado por encima si se desea.

Un plato que no pide permiso

En cada cucharón hay una escena: una abuela removiendo la olla con cuchara de madera, una madre cortando verduras al volver del trabajo, un chico con mejillas rojas esperando que enfríe. La sopa minestrone de Doña Petrona no es solo una receta: es parte de la memoria colectiva. De esas cosas que no se olvidan aunque cambien los tiempos.

Así que cuando el frío apriete y no sepas qué cocinar, acordate de ella. Sacá la olla más grande, abrí la heladera, agarrá lo que haya y prepará esta sopa. No solo vas a comer rico. Vas a sentir que en esa cucharada hay un poquito de historia, de casa, de Petrona.

Click para más recetas.

Visitá la tienda virtual de Schroeder Wines.

Te puede interesar...

Lo más leído

Leé más

Noticias relacionadas

Dejá tu comentario