¿Por qué los tomates no se guardan en la heladera?

El tomate es uno de los ingredientes más populares en la cocina argentina. Ya sea en una ensalada sencilla o en un guiso complejo, aporta color, frescura y un sabor agridulce que encanta a cualquier paladar. Sin embargo, es común que los tomates se deterioren rápidamente si no se almacenan de la forma adecuada.

Aunque muchas personas los dejan en el frutero o los guardan en la heladera, ninguna de estas opciones es recomendable si querés que se mantengan frescos y llenos de sabor. Para evitar que se echen a perder, el lugar ideal para conservar los tomates es a temperatura ambiente, en un espacio fresco, oscuro y bien ventilado.

El frío de la heladera puede afectar tanto el sabor como la textura de los tomates, haciéndolos más harinosos. Si están verdes, lo mejor es dejarlos madurar en la mesada hasta que adquieran un color uniforme. Una vez maduros, podés consumirlos en los días siguientes.

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El tomate se conserva mejor en temperatura ambiente, sobre todo en un lugar fresco.

Trucos para conservar los tomates por más tiempo:

• Temperatura adecuada: Al ser una fruta climatérica , el tomate sigue madurando luego de cosechado. Mantenelos a temperatura ambiente.

• Evitar la humedad: La humedad acelera el deterioro. Guardalos en un lugar seco y bien ventilado.

• No los laves antes de tiempo: Lavarlos antes de almacenarlos puede favorecer el crecimiento de moho y bacterias. Lavá los tomates justo antes de cocinarlos.

• Separar los maduros de los verdes: Los tomates verdes liberan etileno, un gas que acelera la maduración. Guardalos separados para evitar que los maduros se echen a perder.

• Colocarlos boca abajo: Apoyar el tomate con el tallo hacia abajo previene la acumulación de humedad en esa área, evitando el crecimiento de hongos.

• Elegir bien: Seleccioná tomates firmes y sin manchas al comprarlos. Evitá aquellos que estén demasiado blandos o verdes.

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El tomate sigue madurando separado de su planta.

¿Por qué es importante conservar bien los tomates?

• Sabor: Al conservar los tomates correctamente, mantienen su sabor vibrante y su textura firme, esenciales para platos frescos y deliciosos.

• Ahorro: Extender la vida útil de los tomates significa menos desperdicio y más ahorro en tus compras.

• Nutrición: Los tomates son ricos en vitamina C, licopeno y potasio. Al almacenarlos bien, podrás beneficiarte al máximo de sus propiedades.

• Versatilidad en la cocina: Con tomates frescos y bien conservados, podés crear una enorme variedad de platos.

Recetas dulces y saladas con tomates

El tomate no solo es protagonista en recetas saladas, también puede ser la estrella en preparaciones dulces que sorprenderán a todos. A continuación, te presento algunas recetas que exploran todo el potencial de este versátil ingrediente.

Tarta rústica de tomate, queso y albahaca (salada)

Ingredientes

- 2 tomates maduros

- Masa de hojaldre

- 150 g de queso crema o ricota

- Albahaca fresca

- Sal, pimienta y aceite de oliva

Desarrollo

• Precalentá el horno a 200°C.
• Extendé la masa de hojaldre en una bandeja para horno.
• Untá el queso sobre la masa y colocá rodajas de tomate encima.
• Añadí hojas de albahaca, salpimentá al gusto y rociá con un chorrito de aceite de oliva.
• Horneá durante 20-25 minutos, hasta que la masa esté dorada y crujiente.

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Dulce o mermelada de tomate. Super versátil y rica. Fácil de hacer.

Mermelada de tomate (dulce)

Ingredientes

- 1 kg de tomates

- 500 g de azúcar

- Jugo de 1 limón

- Canela en rama (opcional)

Desarrollo

• Escaldá los tomates en agua hirviendo por un minuto, luego retirales la piel y cortalos en trozos pequeños.
• En una cacerola, mezclá los tomates con el azúcar y el jugo de limón. Añadí la canela si lo deseas.
• Cociná a fuego lento, removiendo de vez en cuando, durante 45-60 minutos, o hasta que la mezcla espese y tenga la consistencia de mermelada.
• Verté la mermelada caliente en frascos esterilizados y dejá enfriar.

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Tomates confitados (dulce-salado)

Ingredientes

- 500 g de tomates cherry

- 100 ml de aceite de oliva

- 3 cucharadas de azúcar

- 1 diente de ajo

- Sal y pimienta

Desarrollo

• Precalentá el horno a 150°C.
• En una fuente para horno, colocá los tomates cherry cortados por la mitad, con el ajo picado y el azúcar.
• Rociá con el aceite de oliva, salpimentá, y mezclá bien.
• Cociná a baja temperatura durante 2 horas, hasta que los tomates estén caramelizados y tiernos.

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