Juana Viale y una profunda confesión sobre sus hijos: "Tengo miedo"

Este fin de semana Juana Viale ha mostrado una faceta más personal y emotiva en su programa Almorzando con Juana, donde se refirió al impacto que tendrá en su vida la partida de sus hijos del hogar familiar. La conductora, que combina su rol frente a las cámaras con la crianza de sus tres hijos, Ámbar, Silvestre y Alí, se sinceró sobre el temor que siente frente al síndrome del nido vacío.

Durante una charla con el actor Gabriel Corrado, quien mencionó que sus hijos viven en el exterior desde hace varios años, Juana compartió su propia angustia al imaginar el día en que sus hijos también decidan dejar el hogar. "Tengo un miedo… les voy a poner cadenas a mis hijos para que no se vayan", expresó entre risas, aunque con un tono que dejaba entrever la melancolía detrás de sus palabras.

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Juana Viale habló de cómo es su relación con sus hijos

La actriz y conductora, quien ha forjado una exitosa carrera siguiendo los pasos de su abuela, Mirtha Legrand, explicó que aunque desea que sus hijos sean felices y encuentren su camino, no puede evitar sentir tristeza al pensar en un futuro sin su presencia constante. “A mí me encantaría que mis hijos hagan lo que les dé felicidad, sí, y quedarse a vivir conmigo hasta los 45… mentira", bromeó para alivianar la carga emocional del tema.

Juana detalló cómo el vacío que dejan los hijos al irse impacta en la rutina cotidiana de los padres: "Si vos, en donde vivís, el cuarto que era de tus hijos está vacío, y de repente vas a cenar y bueno… somos vos y yo, buenísimo, somos vos y yo, me encanta. Pero el ruidito ese que hacen constantemente, que a veces te crispa la paciencia, después decís, ‘¿a dónde está eso?’". Estas reflexiones muestran a una Juana que, aunque fuerte y profesional frente a las cámaras, también es una madre que lucha con los desafíos emocionales de la crianza.

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Juana Viale y su hija

Juana Viale habló de una posible partida de sus hijos

La conductora también reflexionó sobre la importancia de dejar que los hijos sigan sus propios caminos, aunque eso implique aceptar su partida: "O que también se vayan, por más que la felicidad de ellos sea que se vayan, hay algo interno que decís ‘ah, la pucha’". Es que cada vez es más normal que los jóvenes busquen oportunidades fuera del país, algo que muchos padres consideran como una gran posibilidad para ellos, pero que al mismo tiempo no pueden evitar dolerle por lo que significa en la cercanía de su relación.