Todos los detalles del ingreso de los familiares en la casa de Gran Hermano

En una jugada que reconfigura por completo la dinámica del reality, Gran Hermano (Telefe) vivió este lunes una de sus noches más emotivas y disruptivas con el ingreso de los familiares y amigos de los 12 participantes que siguen en competencia. La casa duplicó su población con la llegada de figuras clave del entorno de cada jugador, dando lugar a una nueva etapa cargada de emociones, estrategias y giros inesperados.

Santiago del Moro había prometido “grandes innovaciones a la europea”, y aunque el recurso del ingreso de familiares ya es un clásico del formato, la intensidad de los vínculos y la puesta en escena con música, abrazos y lágrimas llevó a esta edición a un nuevo nivel emocional. No solo se vivieron reencuentros conmovedores, sino que cada nuevo ingreso trajo consigo expectativas, tensiones y potenciales redefiniciones del juego.

Uno de los momentos más fuertes fue el reencuentro entre Luz Tito y su pareja, Alberto “Pestañas” Murcia Pérez, quien llegó desde España para apoyarla emocionalmente. “Quiero demostrarle que todo sigue bien tanto afuera como adentro”, dijo el gallego, quien ya había aparecido en el segmento “Congelados”.

Los familiares de los participantes entraron a la casa de Gran Hermano

Chiara, “La Cobra” de la casa, se quebró al ver a su hermano Giovanni, de apenas 18 años, que viajó especialmente para contenerla. “Sé cómo calmarla, soy su debilidad”, dijo él, minutos antes de provocar un abrazo tan largo como las lágrimas que derramaron. Otro momento bisagra se vivió con Sandra, que volvió a abrazar a su marido Lucas Paletta, envuelto en rumores de infidelidad afuera. “Hola mi amor”, fue lo único que él atinó a decir antes de que sonara “Por amarte así” de Cristian Castro y el clima se volviera digno de novela romántica.

La diversidad también tuvo su espacio con el ingreso de Pablo Atkinson, amigo drag queen de Selva, quien desató gritos de euforia, saltos, y el ya icónico “¡que viva la diversidad!”. Del lado emocional y maternal, la entrada de Cecilia, mamá de Lourdes, y Melina, madre de Luchi, devolvió ternura y contención a las jugadoras, que se derritieron en sus brazos con mensajes como: “Te extrañé” y “Tranquila, acá estoy”.

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Los familiares que entraron a la casa de Gran Hermano

Qué pasará en la casa de Gran Hermano

En paralelo, otras incorporaciones como la de Gisela, prima de Katia, y María “Titi” Ruíz, hermana de Eugenia, prometen no pasar inadvertidas. “Vengo a alinear los chakras”, anunció Gisela, mientras que Titi dejó en claro su perfil combativo: “La banco a morir, pero si hay que picantear, lo haré”.

Uno de los ingresos más comentados fue el de Guillermo, hermano de Gabriela, que llegó desde Brasil tras más de un año sin verla. El reencuentro fue musicalizado con “Magalenha” y culminó en un “te amo” en portugués que derritió a toda la casa. En tanto, Juan Pablo (Devi) no solo se emocionó por su hermana Cecilia, sino también por reencontrarse con sus dos perros, Bartolo y Jaime, en uno de los momentos más conmovedores de la noche.

Desde el reality aclararon que si bien estos familiares no competirán directamente por el premio mayor, sí podrán ganar recompensas si se mantienen en la casa por decisión del público. Además, su participación promete recargar de energía —y de tensión— a los “hermanitos”, justo cuando el juego empieza a entrar en su fase decisiva.