Tiene 27 años y fue detenido por la denuncia de una joven. Es hijastro del heredero al trono de Noruega, el príncipe Haakon.
La monarquía de Noruega enfrenta un escándalo que sacudió a la opinión pública del país y a las principales figuras de la Casa Real noruega. Marius Borg Hoiby, hijo mayor de la princesa heredera Mette-Marit, ha sido arrestado tras ser acusado de violación y otros delitos relacionados.
La noticia pone a prueba la imagen de la realeza, en un contexto de creciente escrutinio público para las monarquías europeas.
Marius tuvo varios incidentes por posesión de drogas
Marius, de 27 años, fue detenido en Oslo después de incidentes en una fiesta y tras la revelación de una mujer de que fue abusada por el joven hace unos meses atrás.
Pero no sería el único caso. A raíz de este hecho salieron a la luz otros incidentes preocupantes, incluyendo quebrantamientos de órdenes de alejamiento y posesión de drogas y armas.
Anteriormente, ya había enfrentado acusaciones de violencia doméstica por parte de exparejas, lo que agrava aún más su situación legal y mediática
Qué se sabe de la acusación
Marius Borg Hoiby, hijastro del heredero al trono noruego, el príncipe heredero Haakon, e hijo de Mette-Marit de una relación anterior. Es importante aclarar que no tiene título real ni deberes oficiales.
El joven vive actualmente con la pareja real y sus dos hermanastros, la princesa Ingrid Alexandra y el príncipe Sverre Magnus, quienes también están en la línea de sucesión para suceder a su abuelo, el rey Harald V, de 87 años.
Marius Borg es hijastro del príncipe heredero Haakon
Marius fue arrestado el lunes por la noche en Oslo bajo un cargo preliminar de haber tenido “relaciones sexuales con alguien que estaba inconsciente o que por otras razones no puede resistir el acto”.
La víctima es una chica de 20 años cuya identidad se mantiene en reserva. En Noruega, este tipo de acusación preliminar les permite a las autoridades detener a los sospechosos mientras se investiga.
El hecho se habría producido el 4 de agosto pasado, cuando la policía respondió a unos disturbios en el centro de Oslo. La consecuencia directa fue la detención breve Borg Hoiby.
Fuentes policiales señalaron que habría una grabación que muestra los desmanes durante la fiesta.
La víctima es una joven de 20 años
En ese momento se lo acusó de daños corporales y daños criminales y fue liberado. Los detalles no estaban claros, pero la policía dijo que había “una relación entre el sospechoso y la principal víctima”.
Al día siguiente Borg Hoiby difundió un comunicado donde admitió haber causado daños corporales y destruido objetos en un departamento mientras estaba bajo la influencia del alcohol y la cocaína. Y prometió que buscaría tratamiento por abuso de sustancias.
A partir de ahí comenzaron a sumarse acusaciones contra Marius. Entre ellas la de violar órdenes de alejamiento de exparejas y conducir sin una licencia válida.
Hege Salomon, abogada de la presunta víctima, dijo que “ella está pasando por un momento difícil” y que en realidad la joven no presentó la denuncia, sino que lo hizo la propia policía.
Expulsión de la residencia oficial
El arresto de Marius no solo pone en jaque su reputación, sino que también representa un desafío para la familia real noruega, conocida por su popularidad social dada la cercanía con sus ciudadanos.
Para demostrar firmeza, la Casa Real decidió expulsará Marius de la residencia oficial, marcando un distanciamiento público de sus acciones y así proteger la imagen de la institución
La monarquía busca tomar distancia del joven
Aunque Marius había mantenido un perfil bajo en los últimos años, su historia incluye problemas de salud mental y adicciones que, según fuentes cercanas, pudieron influir en su conducta.
Este pasado ya había generado controversia, especialmente por los informes de su comportamiento conflictivo y su implicación en episodios de violencia
Una princesa en problemas
La princesa Mette-Marit, una ex camarera que enamoró al príncipe heredero, enfrenta ahora una fuerte presión mediática.
La mujer ya pasó por un momento crítico antes del casamiento, cuando surgió que había estado en pareja con un hombre condenado por tráfico de drogas.
Mette-Marit es una figura popular en Noruega
Mette-Marit se disculpó públicamente por su “vida salvaje” cuando se anunció en 2000 la boda real, y dijo que condenaba el consumo de drogas. Desde ese momento los noruegos comenzaron a verla de una manera más positiva.
Ahora es su hijo quien la involucra en un tema escandaloso, y es posible que la propia princesa tenga de declarar ante la policía.
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