14 vinos para conocer el meteórico ascenso del Cabernet Franc

Para muchos consumidores el Cabernet Franc todavía es una rareza. Y eso que lleva varios años de ascenso en hectáreas, así como en la góndola, con una creciente oferta que hoy recorre un amplio rango estilístico. Cultivado desde Salta a la Patagonia, esta uva tinta ofrece una serie de matices que enamoran tanto a los paladares entrenados como a los que no.

El misterio de su atracción es complejo. Por un lado, ofrece tintos con un marcado carácter de fruta negra y aromas de ceniza, donde el paladar es más estrecho y compacto que el Cabernet Sauvignon. Por otro, mezclado en mayoría con Malbec –nunca en partes iguales– permite obtener tintos llenos de matices, que van desde las frutas rojas a las cenizas y pimienta, con taninos finos y de cierto terciopelo.

Cualquiera sea el caso, entre 2002 y 2023, el Cabernet Franc pasó de ser una uva muy marginal, de la que había apenas 250 hectáreas en nuestro país, a una de la que hoy se ofrecen 1858, según cifras oficiales. Un número equivalente a la superficie de Pinot Noir, para tomar dimensión, a la vez que significa un salto de 740%, comparado con los 250% del Malbec para la misma época.

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Hace unos 15 años, cuando escribí mi primera nota de sobre Cabernet Franc, recuerdo que me costó juntar 10 ejemplares para listarlos en la revista para la que trabajaba. Hoy, en los tasting que hago al año, pruebo regularmente más de medio centenar de Franc. Y eso son solo una fracción del mercado, en el que se pueden hallar en listas poco más de 250 ejemplares de Cabernet Franc.

El hecho de que hoy esté ampliamente difundido, repercute de paso en una amplitud de estilos. Están aquellos Franc que se parecen más a un Carménère, en cuanto a que destacan por su nota de morrón asado y su cuerpo, a aquellos que se ofrecen como los tintos del Loire, delgados y de una delicada fruta roja. Entre esos dos extremos se cocina una oferta creciente.

¿Cuáles probar?

El Gran Enemigo Cabernet Franc Gualtallary (2019, $51000). Arquetipo de la variedad y su perfil frutal, este tinto del alto Valle de Uco se luce en añadas frías como la 2019 y la 2021.

Lui Espontáneo Cabernet Franc (2021, 35000). Si hay un vino donde el descriptor de ceniza y fruta negra cuadre, este es el caso. Con estilo directo y frutal, proviene de La Consulta.

Aguijón de Abeja Reina Cabernet Franc (2022, $17500) se elabora con uvas de Pedernal, San Juan, y ofrece un tinto de cereza y granada, con hierbas de campo. Jugoso.

La Celia Pioneer Cabernet Franc (2022, $6900). Con una imbatible relación calidad-precio este tinto de Valle de Uco ofrece fruta y cenizas suaves.

El Esteco Serie Finca Notables (2022, 25000) se elabora con uvas de Cafayateen un estilo especiado y voluptuoso, lleno de sabor.

Polígonos del Valle de Uco San Pablo Cabernet Franc (2022, $25500) ofrece el perfil de Loire, con fruta negra y roja, paladar delgado y de frescura y taninos activos.

Pulenta Estate Cabernet Franc (2021, $57200), con uvas de Agrelo, ocupa el extremo más opulento, con nota de morrón, sabor de fruta negra y riqueza de paladar.

Numina Cabernet Franc (2021, $13000) emplea uvas de San Pablo para definir un estilo maduro, con fruta negra y cierta pizca de ceniza, apoyad en la madera. Sabroso.

Serbal Cabernet Franc (2023, $8800) proviene de San José, Tupungato, y propone un perfil de cereza y mora, con una suave nota especiada. Jugoso y fresco.

Rutini Single Vineyard Gualtallary Cabernet Franc (2019, 41000) es un tinto de buena crianza, con aromas de mermelada y una pizca especiada, y taninos aterciopelados

Zaha Cabernet Franc (2022, $22700). Con uvas de Paraje Altmira, ofrece un perfil de fruta negra, suave ceniza y textura de delicada tiza en boca. Sabroso.

Saurus Barrel Fermented (2023, $16400) se elabora en San Patricio del Chañar como un tinto de fruta negra y pizca de ceniza, madera fina y textura aterciopelada.

Zorzal Eggo Cabernet Franc (2022, 20900) proviene de Gualtallary y propone un estilo desnudo, con paladar delgado y textura de tiza marcada.

Andeluna Altitud (2022, $9200) se elabora con uvas de Tupungato en un estilo de fruta negra, cenizas y mermeladas. Los taninos suman un punto de estructura atractiva.

4 de diciembre: Día del Cabernet Franc

Celebrado el 4 de diciembre, el día mundial del Cabernet Franc fue establecido en 2015 por la bodega Dracaena Wines de Paso Robles, California. Su origen se remonta al siglo XVII, cuando el Cardenal Richelieu llevó esquejes de esta uva azul-negra de Burdeos al Valle del Loira, donde ha prosperado desde entonces. Esta celebración honra su legado y la importancia del Cabernet Franc, una de las variedades más plantadas en el mundo.