Emocionante: así fue la llegada de la pareja cipoleña que viajó a Alaska en una Kangoo
La pareja llegó con misma alegría que los vio partir cuando pusieron primera y partieron a Alaska en su Kangoo. Momento emocionante para amigos y familiares.
Lágrimas, abrazos, risas y mucho amor, en un día verdaderamente emocionante para los más íntimos de Ignacio Ruffa y Alejandra Morello, la pareja cipoleña que cumplió el sueño de viajar a Alaska en una Renault Kangoo. Después de recorrer más de 75.000 kilómetros por América, regresaron a Cipolletti cargados de energía, con ganas de compartir con la familia y los amigos, pero también con el deseo intacto de seguir viajando y experimentando esa forma de vida que encontraron en las rutas y caminos.
"La Chancha", así denominaron a la épica Kangoo que los llevó a Alaska, ingresó a Cipo tocando bocina. Fue un regreso triunfal, aunque no obtuvieron ningún premio ni trajeron colgada en el cuello alguna medalla. En realidad, sí triunfaron. Ganaron una experiencia inolvidable, conocieron países, culturas, experimentaron un sin fin de situaciones que los pusieron a prueba y en el camino se fueron haciendo amigos de otros viajeros, convirtiéndose en algo así como familias nómades en la modernidad.
Pero tal vez, lo más valioso de ese viaje que emprendieron en 2018 y que - pandemia de por medio - los llevó a conocer Alaska, tiene que ver con una actitud ante la vida: la de perseguir los sueños y no claudicar. Antes de lanzarse a la aventura, a Nacho y Ale muchos les dijeron que estaban locos, que no iban a poder llegar en una Kangoo hasta Alaska. No solamente viajaron a Alaska en la Kangoo, sino que "la chancha" fue su casita móvil de dos metros cuadrados durante todos los años que duró el maravilloso viaje por América. Como lo dice el nombre del proyecto que los trasladó a Alaska, hicieron de América el patio de su casa.
Un día despertaban y al abrir la compuerta trasera de la Kangoo, su patio era una playa paradisíaca en Méjico y un poco más adelante un bosque con paisajes increíbles y algún que otro oso, en Canadá. Así anduvieron viviendo, en margen de las rutinas que nos marca la vida, hasta que en Alaska de encontraron con las auroras boreales para darle a su travesía un momento único.
Reencontrarse con la familia y los amigos de acá es para Ale y Nacho un alto en el camino, una parada para llenarse de cariños y abrazos y a seguir adelante porque el próximo desafío ya los está esperando. La pareja cipoleña piensa, dentro de poco, retomar la ruta para recorrer la Argentina de punta a punta, conociendo así cada rincón de nuestro país.
Ignacio Ruffa y Alejandra Morello son contadores públicos nacionales, graduados en la Universidad Nacional del Comahue. Para financiar el viaje a Alaska hecharon manos a algunos ahorros, hicieron trabajo remoto vinculado a su profesión y se convirtieron en artesanos. Aprendieron en el corazón de América a hacer artesanías y las fueron vendiendo a medida que iban recorriendo los distintos países. Ya sobre el final del viaje y luego de compartir tips con viajeros que hacen de sus redes una fuente de ingresos, también se animaron a darle una vueltita de tuerca a la forma de contar su viaje a través de YouTube.
Buena vida para Ale y Nacho, bienvenidos y a seguir soñando. Porque los sueños - lo demostraron - están para cumplirlos por más lejos que haya que ir a buscarlos.
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