Ganaba millones como petrolero pero dejó todo por su sueño de ser campeón mundial de boxeo

Más de una vez regresaba al campo con la cara llena de moretones, los ojos hinchados y algún compañero que desconocía su condición de deportista pensaría “en que lío se habrá metido este para ‘cobrar’ así”. Encima no aparenta su edad -28 años- y tampoco tiene tanta pinta de boxeador –sí alta facha-.

Hoy lo cuenta como anécdota y se ríe. Está feliz y aliviado de haber tomado la decisión de su vida para dedicarse a su gran pasión, el boxeo y a sus amores, sus tres hijos.

Matías Domínguez, quien este viernes será una de las figuras de la gran velada cipoleña, dejó el codiciado trabajo en el pétroleo donde ganaba varios millones para tener más tiempo en la preparación de sus peleas y a la vez mimar y ver crecer a su beba Hada, de 3 meses.

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Mati en el campo petrolero con uno de sus compañeros. Ahora solo se dedica al boxeo y sueña en grande.

“El click fue la última pelea en Valdivia, Chile, que justo nació mi hija tras un embarazo complicado y dije basta, no me voy más al campo, borrarme dos semanas de mi casa, no poder verla ni acompañar a mi señora... No tiene precio estar con la familia…”, asegura a LMCipolletti el apodado Tornado, por la furia con la que se abalanza sobre sus contrincantes en la categoría Superpluma (58.900 kg).

La decisión

No fue fácil porque en la Argentina actual cuesta conseguir un sueldo digno y él vaya si lo tenía. Muchos que la están pasando mal en términos de dinero desearían ese puesto. Por ello no fueron pocos los que cuestionaron su abrupta decisión.

“Ya hace 3 meses que lo dejé, todos me decían estás loco, vas a pasar hambre, pero yo estaba convencido y no me arrepiento de nada”, asegura Mati tras dar con el peso para el combate del viernes ante el temible rival bahiense Julio Noel, duelo en el que buscará conservar su invicto de dos triunfos en el campo rentado, uno por nocaut.

“Tengo otros dos hijos, Mateo de 11 que está en San Juan, donde viví varios años y Valentino, de 10. Me perdí todo trabajando 8 ó 9 años en el petróleo, hay buena relación, pero no pude compartir las cosas que ahora sí comparto con la bebé y mi señora Agostina”, lamenta a horas de su gran presentación en nuestra ciudad.

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Matías en uno de sus paseos con su familia. Ahora disfruta más que cuando laburaba como petrolero.

“Pero nunca me corto solo al tomar una decisión, siempre lo hago acompañando de mi señora y familia”, aclara el pupilo de Bruno Godoy, leyenda del boxeo regional y nacional que le tiene enorme confianza.

Este neuquino que se crió en Rincón de los Sauces y tras un paso por tierras cuyanas actualmente vive actualmente en Centenario recuerda las múltiples y arduas tareas que realizó en el campo al mismo tiempo que intentaba progresar en el cuadrilátero.

“Arranqué en boca de pozo, fui enganchador, siempre laburos pesados. La carrera amateur, de unas 40 peleas, la hice en paralelo al trabajo. Llegaba del campo, me iba a pelear y al otro día otra vez al campo, con moretones, todo roto a las 5 de la mañana. Y allá laburás todo el día, no es vida”, repasa el espinoso camino recorrido, cuando se sacaba los guantes de boxeo y se ponía los de "petroka".

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El Tornado en acción arriba del cuadrilátero.

Pero así como se les planta a adversarios que meten miedo, también se rebeló a su destino. “Vos fíjate que para esta pelea (por la de este viernes en el Gimnasio 1 de la calle Mengelle) pude prepararme bien, comiendo sano, sin trasnochar, porque allá nunca se para y se labura también de noche. Llego con todo y me tengo fe”, avisa ilusionado.

Ahora los esfuerzos pasan por otro carril. Mantenerse en forma física sin excederse con el peso es una de ellas. “Todos nos morimos de hambre antes de las peleas, pero no queda otra”, acepta El Tornado Matías Domínguez al que por la tarde lo espera un último entrenamiento liviano.

Quien a la vez reconoce que todos los boxeadores “sienten nervios y miedos antes de subirse al ring”.

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En una de sus peleas internacionales.

Cuenta que ya de chico le gustaban las piñas pero que evitaba darles disgustos a los padres. Y antes de concentrarse de lleno en la batalla de este viernes, se va a cambiarle el pañal a Hada. El Tronado quiere arrasar en el ring y llegar a ser "campeón del mundo" pero a la disfrutar de la familia. De petrolero a boxeador, renunciando a la plata por un sueño.

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Otro recuerdo de su trabajo en el petróleo. Ya "nunca más".

El elogio de Bruno Godoy para un “futuro campeón”

“Yo le digo que tiene que creérsela y puede llegar lejos, incluso a ser campeón. Si andaba bien cuando trabajaba 12 horas en el petróleo y llegaba cansado, imagínense todo lo que puede dar ahora. Cuando va para adelante no para y ataca con la fuerza de un Tornado, por eso lo llaman de esa manera. Es muy buen chico y tenemos grandes esperanzas puestas en él”, lo elogia su icónico entrenador, Bruno Godoy.

Será parte del gran festival de Boxeo en Cipolletti

Este viernes a las 21 h en el Gimnasio N.º 1 de la ciudad (Mengelle 2000) se llevará a cabo el Festival de Boxeo organizado por el municipio con la participación de referentes internacionales y nacionales del deporte como el citado Mathias Domínguez, Jonathan Prin, Raul Panguilef y Gabriel Adryan Soares.

A través de la Dirección General de Deportes se informó que se van a realizar dos peleas profesionales, una de ellas será entre el boxeador brasilero Gabriel Adryan Soares y Andrés Raúl el “Carnicero” Panguilef y la otra la del Tornado Domínguez. Además, se llevarán a cabo 8 peleas amateur.

Las entradas se pueden obtener personalmente en las instalaciones del Estadio Municipal de calle Naciones al 1700, o en el Complejo Deportivo Municipal de calle Saavedra 260, de 18.30 a 22.30 durante la clase de boxeo.

Los precios

-$10.000 Popular

-$15.000 Platea

-$20.000 Ring Side

Teléfono de contacto para adquirir entradas: 2996 03-2493.

César Abrigo, coordinador de la Dirección General de Deportes, destacó que son peleas de mucho nivel deportivo y se va a contar con peleas amateur, dónde se presentarán representantes de diferentes gimnasios de la ciudad. Y por la Escuela Municipal de Boxeo, se presentará Melina Ortiz, que tratará de conseguir el título AMBAPA, una pelea en categoría de hasta 60 Kg., 4 rounds de dos minutos por uno de descanso”.

También participarán boxeadores profesionales de Bahía Blanca, Bariloche, Centenario, Gral.Roca, Neuquén y Allen.

Ortiz, la boxeadora cipoleña que es promesa

Melina Ortiz viajó durante el 2024, viajó a la provincia de San Luis para participar del Campeonato Nacional Femenino de Boxeo en Villa Mercedes. Tiene 18 años y se inició en el boxeo hace tres, en la Escuela Municipal de Boxeo de Cipolletti.

Es Subcampeona Argentina en el 2° puesto durante el 2024.

Ortiz es la representante de la ciudad de Cipolletti por la Zona 3 que agrupa a la provincia de Río Negro, Neuquén y La Pampa. Cabe destacar que en el año 2023 fue medalla de Bronce.