Ocurrió con una pareja en Vista Alegre. La mujer lo echó de la casa, pero ató a los perros a un poste. "Acá no hacemos división de bienes", dijo la Policía.
Una pareja de Vista Alegre tramitó su separación de mala manera, y los perros a los que cuidaron durante un par de años fueron víctimas de una pelea irracional de adultos. La mujer, luego de expulsar del hogar al varón tras una denuncia por violencia de género, ató a los canes a un poste frente a la comisaría.
El hecho fue confirmado a LMNeuquén por fuentes policiales, y causó indignación en la comunidad rural, cercana a la Comisaría 49, acostumbrada a presenciar todo tipo de delitos, pero no la indiferencia con la que se manejó la situación de este tema familiar.
“Vino la mujer, estaba separada de la pareja, pero en la comisaría no se hace la división de bienes; eso lo tienen que acordar ellos. La mujer dijo: ‘Les dejo a los perros, porque ya no son un problema mío’”, contó una fuente policial que estuvo en el lugar.
La pareja, ambos de alrededor de 30 años, vive en la localidad y ya tenían antecedentes de violencia. Cada tanto se hacía una de las tantas denuncias por violencia (como ocurre seguido en ese pueblo) pero esta vez el conflicto terminó de la peor manera: los perros víctimas de la separación de los dueños.
Se acabó el amor y el cuidado de los perros
A raíz de una denuncia, el hombre había sido excluido del hogar, según pudo confirmarse desde la Policía. Sin embargo, en lugar de tramitar el destino de los bienes -y de los animales que compartieron como familia- la mujer optó por deshacerse de los perros, de una manera que sorprendió a los efectivos policiales.
Ató a los canes al poste frente a la comisaría y se negó rotundamente a reconsiderar su actitud, pese a los intentos de los oficiales por persuadirla. "Vino a la comisaría de mala manera", dijeron.
“Para nosotros fue una situación atípica. Resalta el no hacerse cargo de una vida”, dijeron desde la comisaría. “Los perros son víctimas. No tienen nada que ver con los conflictos de las personas”, agregaron.
Los policías quedaron sorprendidos por la situación sin precedentes para abordar un caso de este tipo, y optaron por proteger a los animales mientras aguardaban instrucciones. Es que saben que el abandono y el maltrato animal es un delito. Estaban atados a los postes de luz y de estacionamiento frente a la fachada de la unidad policial.
“Estuvieron bien cuidados durante tres horas. No queríamos que esta situación se transformara en algo peor, como una denuncia por maltrato”, detallaron.
Finalmente, y tras notificar a la Fiscalía, los canes pudieron tener un destino más amable que el rayo del sol. Fueron entregados al suegro de la mujer, el padre del hombre denunciado, quien se hizo cargo de la situación. Fue una solución improvisada y, en muchos aspectos, injusta, pero la única que permitió resguardar a los perros de un destino incierto.
En Argentina, la Ley 14.346 protege a los animales del maltrato y el abandono y establece sanciones para quienes los maltratan o dejan en estado de desamparo. Pero parece que hay muchos que aún no entienden.
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