Jugó con Diego en Boca, brilló en Cipo y recorrerá el país en Motorhome

A la hora de recordar jugadores históricos que pasaron por Cipolletti en sus años dorados, Marcelo Yorno no solo que no puede faltar sino que hasta ocupa un lugar de privilegio. Y eso que un sinfín de glorias vistieron la casaca del Capataz de la Patagonia.

El legendario arquero se ganó el cariño eterno del pueblo albinegro al convertirse, por ejemplo, en una de las grandes figuras del equipazo que ganó la final ante Huracán de Comodoro Rivadavia, 3 a 2, en el estadio de Olimpo y logró el ascenso al Nacional 1985, hito del que casualmente en los últimos días se cumplieron 40 años.

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Aquel equipazo de Yorno y Giunta que logró grandes resultados en Cipo.

Luego tuvo una rica trayectoria en el fútbol grande y hasta se dio el lujo de atajar en Boca y ser compañero del inolvidable Diego Maradona en el galáctico conjunto que dirigía el doctor Carlos Bilardo (alguna vez destacó que la generosidad del 10 con todo el plantel en el reparto de premios le permitió crecer económicamente”) .

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Yorno con Maradona en el Boca de Bilardo.

El tiempo pasó, colgó naturalmente los guantes hace rato, dirigió un par de clubes y se radicó en Necochea donde estuvo ligado a diversos emprendimientos. Aún hoy sigue activo en el campo laboral.

Ahora, a días de celebrar sus 64 años, este verdadero número uno ya no es noticia por sus espectaculares atajadas sino por un seductor y apasionante proyecto de vida.

Es que sacando a relucir su costado aventurero, compró una Van en nuestra región, más precisamente en Fernández Oro, la acondicionó con su pareja y amigos y ya se apresta a salir a la ruta con mayor frecuencia para disfrutar de su tiempo libre descubriendo o conociendo mejor las bellezas de nuestro país.

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Marcelo y Andrea ya disfrutan de algunas escapaditas.

“Con Andre, mi pareja, terminamos de armar un Motorhome que lo compramos justamente en el Alto Valle, más precisamente en Fernández Oro hace un año exacto. Lo trajimos a Necochea, donde soy oriundo y vivimos, lo desarmamos íntegro y lo empezamos a armar de nuevo. Fue un trabajo arduo pero ya está joya. La idea es empezar a viajar, me jubilo el año que viene pero vamos a ver si podemos iniciar antes el periplo por todos lados”, cuenta con su habitual cordialidad el ex guardavallas a LM Cipolletti.

De inmediato surgió la curiosidad. Cómo llegó a dar con la Van de nuestra región. Y él mismo devela el misterio. “La vi en un anuncio por facebook, hice el mensaje y justo Jorge Roa, el vendedor me conocía así que hicimos enseguida el trato y la trajimos para acá. Ya era linda y la dejamos muy bonita y lista para empezar a desandar ese camino que tanto entusiasmo nos genera”, revela sumamente motivado con las vivencias que comenzarán a experimentar en breve. De hecho ya realizaron un par de escapaditas cerca como se aprecia en las imágenes.

Con Andre y la ayuda de un amigo carpintero y otro plomero, “la armamos toda, la dejamos chiche. Le metimos muchas horas de laburo, hoy que la vemos terminada nos sentimos satisfechos y felices de poder pensar en arrancar”, resalta orgulloso con los resultados.

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La pareja armo de punta a punta la Motorhome que compró en Oro.

Consultado sobre si en su agenda viajera contemplan o tienen previsto visitar esta zona en la que siempre serán bien recibidos amplía con una sonrisa: “Seguro vamos a pasar en algún momento por allá, hay mucha gente querida y el sentimiento por el albinegro siempre está”.

Admite que en su época de jugador no era algo que proyectaba y se le despertó el hobby “más de grande” e incentivado por su media naranja. “Me surgió la idea de armar el Motorhome en especial cuando conocí a mi señora, que hace 3 años que estamos juntos y felices”, destaca quien también se lució en Estudiantes y Central.

Un calendario soñado

Marcelo y Andrea ya confeccionaron un calendario viajero extenso y sumamente tentador. “La idea es viajar de marzo a diciembre, conocer bien la República Argentina y luego volver y hacer verano acá, en la playa, estar con nuestros afectos”, adelanta Yorno sobre la travesía que se avecina.

Debajo de los tres palos era ágil y rápido de reflejos. También lo es para planificar el futuro aunque como en esas situaciones en las que debía improvisar y mostrar repentización para evitar un gol, también le agrada dejarse sorprender y que el destino los lleve al próximo lugar.

“Todavía no tenemos rumbo fijo, pero como decimos nosotros, vamos a salir para donde nos lleve el viento”, anticipa Yorno, quien reitera una y otra vez que guarda “los mejores recuerdos de Cipolletti, ahí nació mi hijo”.

¡Buena ruta Marcelo y Andrea! En Cipo los esperamos.

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Ya están listos para salir a recorrer el país y disfrutar la vida.