La cervecería que fue refugio de los petroleros sin trabajo en la pandemia

"Mi nombre es Leo. Estoy acá en Añelo hace seis años", dice Leonardo, así a secas, el alma detrás de La Comarca Bull's, una cervecería que floreció en Añelo cuando casi nadie se animaba, en plena pandemia de 2020, y que le dio de comer a los petroleros de todo el país que llegaban con el sueño bajo del brazo en Vaca Muerta.

El local se ubica en el Casco Viejo de Añelo, frente a la plaza principal, y a toda hora hay mucha demanda, como en muchos lugares de viandas y gastronómicos del pueblo. Leonardo vino de afuera, y apostó cuando pocos querían, durante la época en que el petróleo se desplomó en el mundo, donde había petroleros en la casa y sin cobrar.

“Empezamos como un localcito de recargas (de cerveza con el boom en la pandemia). Después esto fue creciendo. Empezamos a agregar mesas, comida… y hoy en día todo el mundo conoce lo que es la cervecería”, cuenta con una sonrisa que mezcla orgullo y esfuerzo.

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Claudio Espinoza

El lugar gastronómico comenzó con algo muy pequeño, casi tímido, y se transformó en un punto de encuentro para una localidad que no para de recibir familias y trabajadores de todo el país. Pero en esa época era algo especial. No andaban demasiadas personas en la pandemia, y muchos petroleros que quedaron en la casa por la crisis y sin cobrar. Fue en ese escenario que se consolidó el local.

Cervecería: el boom de la pandemia que creció

“Fue complicado al principio, por todo lo que se estaba viviendo en todos lados. Pero la gente se supo adaptar bien”, recuerda el muchacho, quien en tono humilde, conoce bien lo que sucedió en el pueblo.

Es más, y lo que parió una locura en su momento se convirtió en una oportunidad desde la crisis. “Fue un boom el tema de la cerveza artesanal cuando recién arrancamos. Eso fue lo que nos dio pie para crecer como local y empezar a traer comidas, otras variedades de tragos, y platos de distintos lugares del país que por ahí acá no se hacen", explica.

Comarca Bull's es hoy un lugar de pertenencia para muchos. Se respira el ritmo de Añelo, ese pueblo que vive entre el vértigo del petróleo y la búsqueda de una ciudad con identidad propia más allá de loa cambios. “Todos los días ingresan familias, gente que busca un futuro mejor. Es una localidad que está en pleno auge de crecimiento”, dice Leo.

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Claudio Espinoza

El trabajo no fue fácil, sobre todo por los proveedores y la distancia “Por ahí costaba un poco, teníamos que ir nosotros a buscar la mercadería. Pero una vez que ya te armás con los distribuidores de Neuquén, se hace mucho más fácil”, cuenta sobre el detrás de escena de sostener un comercio gastronómico en medio del desierto, con rutas largas y pocos recursos logísticos.

Pero el desafío no frenó su entusiasmo de seguir adelante. “Nosotros siempre estamos tratando de ofrecer algo distinto para que también tengan variedad en la gastronomía local", agrega.

Hoy, por Comarca Bull's pasan trabajadores del petróleo, vecinos del pueblo, jóvenes, familias. “Viene gente de todos lados del país: de Mendoza, de Tucumán, incluso de Paraguay. Tenemos dominicanos… de todos lados, realmente", describe Leo.

El compromiso con el pueblo

Mientras tanto, Leo observa cómo Añelo cambia, a paso lento pero firme. “Ahora están pavimentando las calles, que es muy importante. Vivir entre calles de tierra en una ciudad tan rica es medio complicado. También están llegando con el gas, con el agua a las afueras del pueblo. Hicieron una planta potabilizadora nueva que sirve muchísimo porque todo el tiempo llega gente de afuera", explica.

Leonardo no habla solo de cerveza, sino también del fututo del pueblo. De una pueblo que crece a pulmón y con el apoyo de los privados. De una cervecería que nació cuando el mundo se cerraba, y que hoy abre sus puertas cada noche para abrazar a los que vienen a probar suerte en el corazón de Vaca Muerta.