Con la temporada de cerezas comenzó llegar personal del norte del país. La demanda de mano de obra será menor a la cosecha anterior.
La temporada de cosecha ya está en marcha en Río Negro, con las frutas finas, y como todos los años miles de trabajadores golondrinas comenzaron a viajar a la provincia. La cifra estimada, sin embargo, es significativamente menor a la temporada anterior.
Según afirmaron desde la seccional regional del gremio Uatre, serán 11 mil los cosechadores que lleguen desde el norte del país para trabajar en las chacras antes de fin de año. Desde hace años, la cifra se estima con gran precisión ya que hay controles para que no viajen personas sin empleo asegurado.
El gremio participa de los controles para evitar los problemas que acarrean los trabajadores golondrina cuando llegan al Valle sin trabajo y no tienen cómo regresar a su ciudad de origen. "Ya no es como antes, que los subían a un colectivo porque el viaje era gratis", confió un dirigente sindical sobre los cosechadores golondrina.
El delegado regional del gremio UATRE en Río Negro y Neuquén, Omar Figueroa, detalló que en las últimas semanas ya comenzaron a llegar los primeros trabajadores temporales, quienes se repartieron en ciudades de Río Negro y Neuquén para la cosecha de cerezas, punto de partida de la temporada de cosecha en la región.
Se trata de una fruta con menor cantidad de hectáreas sembradas, en comparación con la pera, pero en crecimiento. Es la principal variedad de cosecha en ciudades como Chimpay, Centenario y El Chañar, en Neuquén.
Inicialmente, ingresaron un total de 11.000 trabajadores solo para el raleo y la cosecha de fruta fina. Figueroa señaló que para enero ingresará un segundo grupo de trabajadores temporales, de entre 16.000 y 18.000 personas.
A diferencia del año pasado que ingresaron 25.000 trabajadores, esta temporada se espera una disminución considerable. En principio, el dato no se vincula a bajas expectativas en torno a la cosecha. Figueroa atribuye la reducción de la demanda de mano de obra al adelanto en la fecha de la fruta, reduciendo así la necesidad de personal para el raleo.
“Será un poco menos porque la fruta se adelantó y no se necesita tanta gente para el raleo. Eso no significa que quienes ya tienen contrato pierdan su lugar de trabajo, pero quizás trabajen menos días”, explicó Figueroa para brindar seguridad a los trabajadores.
Controles a la llegada de trabajadores golondrina
Otro punto que destacó fue la importancia de ser más rigurosos para garantizar que quienes ingresen a la región cuenten con un trabajo asegurado. “Hemos mantenido reuniones con la Secretaría de Trabajo, y se ha logrado un acuerdo conjunto con Renatre y Uatre para realizar los controles necesarios”.
En la previa al comienzo de la temporada de cosecha, tuvieron algunos desacuerdos entre la delegación y UATRE Tucumán, ya que, como todos los años, muchas personas llegan sin contrato al Alto Valle, esperando encontrar trabajo, algo que no siempre resulta.
“Hemos aclarado que no envíen gente sin motivo, porque el Gobierno ofrece colectivos gratuitos, entonces se suben sin tener contrato. Sin embargo, deben venir trabajadores que ya tengan un acuerdo laboral con las empresas, para que puedan llegar directamente a sus lugares de trabajo”, exigió Figueroa.
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