La tenencia de un perro derivó en una escalada de amenazas y denuncias

Una mujer denunció ante la Policía a su hermana ya que aseguró que, después de robarle el perro de la casa de la madre de ambas, "golpeó" a su hijo de 14 años cuando este quiso recuperarlo. El menor quedó con hematomas en el rostro y golpes en otras partes del cuerpo.

El fuerte episodio ocurrió el pasado lunes 10 de marzo en un domicilio de la calle Chile al 300 de Neuquén capital. Carolina Lepin Liche denunció en la Comisaría Segunda a su propia hermana, quien le habría propinado a su sobrino una fuerte golpiza.

"La tía lo llamó a mi hijo para que vaya a su casa y cuando él llegó la pareja de ella lo agarró por la espalda y lo tiró al piso. Lo golpearon con una piedra en la cabeza, lo tuvieron retenido dos horas y recién ahí llamaron a la policía para decir mentiras de que mi hijo había entrado por la fuerza", relató a LMNeuquén Lepin Liche.

La tenencia de un perro derivó en una escalada de amenazas y denuncias

La mujer está indignada y no sale de su asombro. Contó que está distanciada de su hermana hace unos cuatro años y que no puede creer lo que hizo. El perro en disputa es un caniche color blanco que Carolina compró a su hijo hace diez años y que, cuando estaba de visita en la casa de su madre, su hermana se llevó sin previo aviso.

Después de varios pedidos de devolución sin respuesta, el dueño de la mascota, el adolescente de 14 años, se presentó en la casa de su tía a buscarla y fue ahí donde, según su mamá, recibió la golpiza.

La tenencia de un perro derivó en una escalada de amenazas y denuncias

Es la mascota del adolescente desde niño.

"Mi hijo fue confiado, es la casa de su tía que prácticamente lo crió, no se esperaba este recibimiento. Lo desfiguraron, lo golpearon, le pegaron con una piedra en la cabeza", insistió la mujer, quien presentó ante este diario la denuncia policial.

Golpiza a un menor de edad

La mujer pidió a la Justicia que tome cartas en el asunto y que intervenga, ya que la situación "desbordó todos los límites". "Mi hijo es menor de edad y lo golpearon", relató ante el agente policial.

El joven golpeado quedó con una fractura de tabique, hematomas en el rostro y mucho miedo de volver a vivir una situación similar. "Yo no sé qué secuelas psicológicas le va a quedar a mi hijo por esta golpiza, encima que le pegó su propia tía", remarcó.

La tenencia de un perro derivó en una escalada de amenazas y denuncias

Un día después de la golpiza, esta mujer amplió su denuncia policial y detalló que eran "tres las personas que golpearon al menor". "Mientras lo tenían retenido a mi hijo le dijeron que no iba a salir con vida y que si lo mataban no iba a pasar nada y que lo iban a mandar a un reformatorio", indicó.

También dio cuenta ante la Policía que su hijo fue atendido en el Hospital Castro Rendón, donde un médico certificó sus lesiones. Y pidió que se soliciten los registros fílmicos que puede haber en las cámaras de esa cuadra que hayan registrado los movimientos de los atacantes.