La Defensoría del Pueblo realizó una encuesta para saber cuáles son los problemas más recurrentes de los neuquinos. Respondieron de todos los barrios.
A través de una encuesta realizada en la Fiesta de la Confluencia 2025, la Defensoría del Pueblo de Neuquén identificó los seis problemas más recurrentes de los vecinos de la capital. El objetivo es trabajar en soluciones para inconvenientes cotidianos y preocupaciones de los habitantes de Neuquén, que van más allá de los obstáculos de convivencia que se solían abordar en la institución.
Gustavo Pereyra, Defensor del Pueblo de la ciudad de Neuquén, explicó en LU5 que las encuestas dejaron "un claro mensaje de cuáles son los problemas de la sociedad neuquina" y que son representativas de la ciudad, ya que por el stand de la Fiesta de la Confluencia pasaron unos 300 vecinos de distintos barrios a responder.
"El mayor problema que nos plantearon, en un 45% de la encuesta, es lo referido por la gente es la inseguridad", señaló el funcionario en relación a los crecientes hechos delictivos que se registran en la calle, y que no ocurren solo en Neuquén capital sino a nivel nacional.
En segundo término, un 19% de los encuestados aseguró que su principal reclamo es para obtener mejoras en servicios públicos, que incluyen la falta de acceso a prestaciones básicas como agua o luz, así como mejoras en el asfalto.
Con un 12% del total se ubicó una de las preocupaciones que suele formar parte de la agenda diaria de la Defensoría: problemas de convivencia, ruidos molestos y otras situaciones ente vecinos.
Además, los neuquinos encuestados aseguraron que vivían otras preocupaciones en la ciudad: a un 9% le interesa resolver las situaciones de tránsito, un 8% busca mejores en los espacios verdes y un 5% reclama cambios en los sistemas de transporte.
"El espíritu de esta encuesta es hacer una revisión del rol de la Defensoría, ya pasaron 25 años de su creación y hay que analizar el rol para los próximos 25 años", dijo Pereyra en una entrevista con LU5.
Soluciones ante la inseguridad
Para el Defensor, la inseguridad creciente es una de las mayores preocupaciones de la comunidad, por lo que su oficina debe hacer algo más que recibir reclamos y apelar a las instituciones a cargo. También debe construir soluciones junto a los vecinos.
"Todos los organismos públicos tenemos la obligación de trabajar en los problemas de la gente, con propuestas o acercando a la Policía o el Ministerio de Seguridad los problemas de la ciudadanía", dijo y agregó: "No es sólo recibir reclamos y acercarlos a la Municipalidad, sino hacer propuestas para llegar a la solución. Todos podemos hacer propuestas de solución, desde la Defensoría, los vecinos y la Provincia, a través de la Policía".
"La Municipalidad ha hecho sus aportes con espacios públicos, seguros, iluminación, limpieza de baldíos", agregó.
Y señaló: "El delito siempre fue dinámico y fue cambiando, por eso las instituciones tienen que ponerse a la altura de las circunstancias. Tiene que recuperarse el trabajo en la calle, con prevención del delito y de inteligencia para detener el crimen organizado de las bandas. Es una preocupación que vemos como lejana, pero está más cerca que nunca y hay que trabajar en eso".
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