Otro operativo en la casa de un acumulador: la increíble cantidad de cocinas que tenía en el patio

En apenas media hora de trabajo seis trabajadores municipales, con apoyo de maquinaria vial, llenaron este martes una cajuela de 10 metros cuadrados de superficie y 2 metros de alto con objetos inservibles y basura que un hombre por años acumuló en el patio de su casa.

La familia del acumulador está compuesta por su esposa, un adolescente y una criatura de dos años. Vive en el barrio Jaime De Nevares, cerca del club San Cayetano. El municipio intervino con permiso familiar debidamente documentado por tratarse del ingreso a una propiedad privada.

“En este caso hay una persona con una enfermedad importante, pensaba que una rueda de bicicleta le podía servir, que a una cama vieja la iba a poder reparar o un juguete, y así fue acumulando residuos durante años”, explicó Cristian Haspert, subsecretario de Limpieza Urbana.

“En el patio, que es chico, había por lo menos 10 cocinas que no sirven absolutamente para nada”, ejemplificó luego, pero observó que entre toda la basura “encontramos residuos domiciliarios”. “Se había transformado en un foco infeccioso por la presencia de roedores y otras plagas”, agregó.

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Mientras Haspert hablaba se acercaron vecinos que conviven con esta situación insalubre y decían estar contentos por la limpieza, en tanto miraban el trabajo del bobcat que cargaba y descargaba montones de desechos en las cajas de los camiones municipales que iban y venían.

“Además, haremos una poda correctiva de los árboles a pedido de representantes del club San Cayetano que se acercaron hasta aquí porque las ramas invaden su terreno” y son de gran tamaño, sumó.

Haspert estimó que en el transcurso de las próximas horas el patio quedará totalmente limpio, “es una satisfacción para la familia y también para nosotros pensar en que el niño de dos años podrá jugar allí en condiciones de higiene”.

Según señaló el funcionario municipal, el personal de Limpieza Urbana también tenían previsto realizar una poda correctiva de los árboles que se encuentran en el patio de la vivienda de la familia donde se realizaron las tareas. “Va a quedar impecable”, aseguró Haspert.

Antecedente en Gran Neuquén

En septiembre pasado se denunció la presencia de gran cantidad de chatarra y basura que acumulaba un hombre de esta ciudad en su casa del barrio Gran Neuquén. En la ocasión, una cuadrilla de Limpieza Urbana municipal retiró más de 25 camiones de desperdicios y diez bateas de 20 metros cúbicos completamente repletas de residuos.

Hacía bastante tiempo que Haspert y su equipo de trabajo intentaban convencer al acumulador, de aproximadamente 65 años. Pero el apego era tan grande que no era posible dar vuelta la página.

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Sebastián Fariña Petersen

Algunas veces accedió a que la Municipalidad coloque cajuelas de 20 metros cúbicos afuera de su vivienda para tirar la basura. "Pero los vecinos usaban las cajuelas, y todo lo que era chatarra lo terminaba metiendo adentro de su casa. O sea, metía más de lo que sacaba", comentó el funcionario municipal en la ocasión.

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El acumulador más grande registrado en la ciudad.

Sebastián Fariña Petersen

La estrategia, entonces, tuvo que ser otra. Desde el área de Limpieza Urbana establecieron contacto con los hijos y las hijas del hombre, quienes lograron convencerlo de retirarse de la vivienda para que se pueda implementar un operativo. Tan gran fue que todos los otros procedimientos de limpieza desplegados en otros sectores de la ciudad tuvieron que interrumpirse para concentrarse en la tarea de poner fin a la historia de un acumulador compulsivo en el barrio Gran Neuquén.

Con anterioridad, su familia había solicitado la colaboración de otras personas para que retiren de la propiedad todos los hierros y materiales que puedan reciclarse o recuperarse para su comercialización.