Servicio Cívico: la grotesca militarización de Bullrich y el sarcasmo a la educación pública

Para “sacar a los jóvenes de las calles y alejarlos del delito y la droga”, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció esta semana el regreso del Servicio Cívico, que, con más penas que gloria, intentó llevar a cabo durante el gobierno de Mauricio Macri, cuando ocupaba el mismo cargo. El restyling llevará ahora el nombre de “Un Puente a la Ciudadanía, la Educación y el Empleo”.

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Patricia Bullrich, en septiembre de 2019, en Campo de Mayo, con jóvenes alistados para el Servicio Cívico.

NA.

El programa, de carácter voluntario, está dirigido a jóvenes de entre 18 y 24 años que no trabajan ni estudian. Según se informó, Campo de Mayo, Bariloche, Santiago del Estero, Jesús María, Rosario y Misiones, son los primeros lugares a los que llegará el Servicio Cívico y, con el tiempo se irá expandiendo para completar el programa en 11 ciudades de toda la Argentina. Además, buscará formar a los jóvenes en diferentes talleres y como recompensa les entregarán certificaciones. Saldrán del curso con presuntas “herramientas para insertarse en el mundo laboral o bien, para poder terminar los estudios secundarios”.

¿Por qué el anuncio fue hecho por Bullrich? La respuesta es porque Gendarmería Nacional volverá a ocupar un lugar central en las capitaciones, con apoyo del Ministerio de Capital Humano.

Casi al mismo tiempo que Bullrich hizo el anuncio, se conoció el informe titulado “Disenso en riesgo”, de Amnistía Internacional, que arroja las “cifras alarmantes” sobre los hechos ocurridos en 15 manifestaciones y que dejó el “Protocolo Anti-piquetes” instalado por la ministra de Seguridad. Añade que, en los mismos, se hizo un uso “desproporcionado” de las fuerzas de seguridad “como norma” y que, con este informe, se encontró “un patrón de represión y criminalización” para quienes se manifestaron para expresarse en contra de las políticas. Precisamente, Gendarmería fue una de las fuerzas que ocupó un lugar preponderante en estos hechos.

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Omar Novoa

Resultaría llamativo que un gobierno utilice a Gendarmería en tareas educativas sino fuera porque, a la par, se optó por ahogar presupuestariamente a las universidades estales. A esta altura no parece haber dudas de cuál es el calibre usado por el Gobierno nacional para gatillar contra la educación pública.