El velatorio de Diego Dinamarca y Ezequiel Millaín fue en las instalaciones del gimnasio municipal de Loncopué. Antes del mediodía se realizó la ceremonia de inhumación en el cementerio local.
En medio de tremendas escenas desgarradoras de tristeza y dolor, este lunes a la mañana los familiares y todo el pueblo de Loncopué le brindaron el último adiós a los dos jóvenes fallecidos en el siniestro vial producido este domingo a unos 8 kilómetros de esa localidad, sobre el ripio de la ruta 21 camino a El Huecú. Diego Javier Dinamarca (24 años) y Luis Ezequiel Millaín (25 años), las dos víctimas fatales, fueron velados desde el domingo a la tarde en las instalaciones del gimnasio municipal. En tanto, después de las 11 de este lunes, se procedió a sus exequias en el cementerio local, acompañados por una multitud.
El intendente de Loncopué, Daniel Soto, en contacto con LMNeuquén, dio a conocer la tremenda conmoción que atraviesa a toda la comunidad por estas horas: “Han sido un domingo y un lunes muy tristes para todos. Desde el primer momento estuvimos acompañando a las familias en este doloroso momento”. A continuación agregó que “como dirigentes o como simples habitantes de un pueblo como el nuestro, cada vez que se pierde la vida de un ser querido, un ser conocido nos genera un triste dolor”. En el mismo sentido, añadió que “en el pueblo nos conocemos todos. Somos como una gran familia y a estos chicos los hemos visto transitar las escuelas, las calles del pueblo. Entonces nos genera un profundo dolor”.
Todo el pueblo de luto
Soto puso en palabras la tristeza y el desamparo que invade a los familiares de los jóvenes fallecidos, a sus amigos y a todos aquellos vecinos que tenían un grado de cercanía con ellos. “Estamos de luto y sentimos que estamos de luto en el pueblo. Muy conmovidos todos. Ha sido una tragedia inesperada que nos marcará para toda la vida”, dijo y comentó que personalmente y, desde la intendencia, aportaron todo el acompañamiento necesario a las dos familias afectadas para que puedan transitar este dolor y el duelo por la pérdida irreparable de sus hijos. “Estamos acompañando a la familia en este doloroso momento y siempre a disposición de todo lo que esté a nuestro alcance”, manifestó.
Trabajar en educación vial
Las autoridades municipales de Loncopué, en medio de la conmoción que provocó el hecho en el pueblo y en toda la provincia, buscan que esta tragedia y la muerte de los vecinos amantes del deporte BMX no sean en vano. Para eso, el intendente Soto se refirió a la necesidad de instrumentar acciones que tengan que ver con la educación vial. “Cuando hay un accidente o siniestro vial de estas características, creo que hay que pensar urgente en planes de prevención y de educación vial para que estos eventos no sigan ocurriendo y se sigan cobrando vidas”, remarcó el jefe comunal. Por último, indicó que “hay que trabajar urgente en estos temas y pensar y planificar que estos siniestros y accidentes viales no se sigan llevando vidas de ninguna persona más”.
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