Bahía Blanca, golpeada por las inundaciones: los mensajes de Leo Messi, Manu Ginóbili y Abel Pintos
Los deportistas y el cantante expresaron su pesar por lo que ocurrió en el sur de la provincia de Buenos Aires.
Bahía Blanca atraviesa uno de los momentos más difíciles de su historia tras el trágico temporal que dejó la ciudad bajo el agua. Mientras los equipos de rescate trabajan sin descanso para asistir a las víctimas y restablecer los servicios básicos, la tragedia ha despertado una ola de solidaridad dentro y fuera del país. Figuras del deporte y el espectáculo han expresado su apoyo a los damnificados, sumándose a diversas campañas de ayuda.
El piloto de automovilismo Franco Colapinto fue uno de los primeros en manifestar su preocupación por la dramática situación en la ciudad. A su gesto se sumó Lionel Messi, quien, tras la victoria de Inter Miami, utilizó su cuenta de Instagram, seguida por más de 500 millones de personas, para enviar un mensaje de aliento: "Estamos siguiendo con tristeza lo que está pasando en Bahía Blanca. Mis condolencias a las familias que perdieron a sus seres queridos y mucha fuerza para todos los que la están pasando mal en este momento tan difícil".
Otro que no tardó en pronunciarse fue el exjugador bahiense de la NBA, Emanuel Ginóbili, quien expresó su dolor por lo sucedido en su ciudad natal. A través de su cuenta de X, donde tiene más de 4 millones de seguidores, escribió: "Otro golpe duro para mi querida Bahía Blanca. Ahora una inundación. ¡Qué tristeza lo que se ve! Abrazo enorme a la distancia a todos los que la están pasando mal". Además, el exbasquetbolista ha impulsado campañas solidarias para recolectar donaciones, al igual que lo ha hecho en anteriores emergencias en la ciudad.
Además de Messi, Ginóbili y Colapinto, otros referentes del deporte y la música han manifestado su angustia por la catástrofe y su disposición a ayudar. Abel Pintos, nacido en la localidad de Ingeniero White, también afectada por la inundación en el sur bonarense, utilizó su cuenta de X (exTwitter) para compartir su tristeza: "Es muy duro lo que está pasando en Bahía. La tristeza es imposible de explicar. Estamos y vamos a estar en todo lo que se pueda hacer para ayudarnos entre todos, como lo hemos hecho siempre. Fuerza a todos".
Una ciudad devastada y en alerta
El panorama en Bahía Blanca es desolador. De las 16 víctimas fatales, aún hay cuatro sin identificar y muchas familias esperan novedades sobre sus seres queridos desaparecidos. Hasta el momento, 1.296 evacuados se encuentran alojados en 13 centros de asistencia, mientras que el resto ha sido acogido por familiares y amigos. Las autoridades han señalado que las condiciones en varias rutas siguen siendo peligrosas, lo que dificulta las tareas de rescate y la llegada de ayuda.
El Ejército Argentino ha desplegado operativos de asistencia en distintos puntos de la ciudad, colaborando con la distribución de alimentos, provisión de agua potable y la evacuación de personas que aún se encuentran atrapadas en sus hogares. La magnitud del desastre ha movilizado a múltiples sectores de la sociedad, que buscan formas de contribuir en medio de la crisis.
La reconstrucción y el restablecimiento de servicios
Uno de los principales problemas tras la tormenta ha sido el colapso del suministro eléctrico. Sin embargo, según informó la empresa EDES, ya se logró restablecer el 55% del servicio en Bahía Blanca. En un comunicado oficial, explicaron que 400 operarios están trabajando en la ciudad y que en las próximas horas se sumarán refuerzos de otras distribuidoras de la provincia.
"Para acelerar las tareas de normalización, la empresa desplegó un equipo de operarios y sumará en las próximas horas personal proveniente de EDEN y EDEA, además de 100 contratistas adicionales", precisó EDES. No obstante, anticiparon que restablecer el servicio por completo podría demorar varios días, debido a los destrozos en la infraestructura eléctrica.
A medida que las aguas comienzan a bajar, Bahía Blanca enfrenta el desafío de la reconstrucción. Con cientos de hogares afectados, daños en edificios públicos y calles intransitables, la recuperación demandará un gran esfuerzo de las autoridades y la comunidad. Mientras tanto, la solidaridad sigue creciendo, con numerosas campañas de donación organizadas por distintas instituciones y voluntarios que buscan aliviar el impacto de esta catástrofe.
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