Chubut: la jueza de los besos a un preso ahora podría afrontar un juicio penal

La ex jueza de garantías de Chubut, Mariel Suárez, conocida por el polémico episodio en el que fue filmada besándose con un homicida en la cárcel, podría enfrentar un nuevo proceso judicial.

Este miércoles la Justicia realizará una audiencia preliminar para determinar si será procesada por el delito de "incumplimiento de los deberes del funcionario público", luego de conocerse nuevos detalles que, a criterio de una fiscal, ameritan que sea enjuiciada.

El caso de Suárez, apodada como “la jueza de los besos”, causó un escándalo a nivel nacional a fines de 2022, cuando fue destituida tras la difusión de las imágenes que la mostraban en una situación comprometida con un preso dentro del Instituto Penitenciario Provincial de Trelew.

A raíz de este incidente, la entonces jueza fue apartada de su cargo, y ahora, en un nuevo episodio, nuevas pruebas presentadas por la fiscal general de Esquel, María Bottini, podrían ponerla ante la ley, en el banquillo de los acusados.

Según Bottini, Suárez habría faltado deliberadamente a una audiencia de control de detención en Comodoro Rivadavia, alegando que estaba enferma.

Sin embargo, la fiscal descubrió que, en realidad, la jueza se encontraba en la cárcel de Trelew visitando al preso con el que había sido vista en las grabaciones.

"Tenía una audiencia de control de detención en Comodoro y no fue porque dijo que estaba enferma. Luego se corroboró que estaba en el Instituto Penitenciario Provincial, en Trelew", afirmó la fiscal Bottini en declaraciones a FM El Chubut.

Este nuevo hecho ha llevado a la fiscalía a presentar ahora una denuncia penal contra Suárez por incumplimiento de sus deberes como funcionaria pública.

De comprobarse estas irregularidades en el juicio, la ex magistrada podría enfrentar consecuencias más severas que las que ya sufrió con su destitución.

Este miércoles, en la audiencia preliminar, se determinará si existen pruebas suficientes para avanzar hacia un juicio formal. Si el caso progresa, se conformará un tribunal especial, que estará integrado tanto por jueces profesionales como por ciudadanos comunes.

"La diferencia con el juicio por jurados es que los ciudadanos trabajarán con los jueces técnicos y deberán fundamentar su decisión", explicó Bottini.

Los polémicos antecedentes de la ex jueza de Chubut

Tras el elocuente video en el que se la veía besando en la boca, compartiendo mate y sacándose fotos con Cristian Omar Bustos, condenado a perpetua por matar a su bebé de 9 meses y a un policía, la jueza en su momento negó el beso y aseguró que el trato íntimo se dio en el marco de una investigación académica.

Mientras esas polémicas declaraciones televisivas no hicieron más que acrecentar el escándalo que se cernía sobre ella, se conocieron polémicos antecedentes de Suárez.

Uno es que ya había sido destituida en 2013 de su cargo luego de que el ex intendente de Comodoro Rivadavia, Néstor Di Pierro, la acusara de “liberar presos por teléfono”. Aunque la magistrada le envió una carta documento a Di Pierro para que se retractara, el entonces jefe comunal nunca lo hizo.

Un año antes, el Consejo de la Magistratura había votado por unanimidad que el desempeño de Suárez había sido insatisfactorio debido a incumplimiento de plazos procesales propuestos por el Superior Tribunal de Justicia.

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Si deciden procesarla, a la ex jueza Mariel Suárez la juzgará un tribunal integrado por juristas y ciudadanos comunes, que deberá presentar una fundamentación técnica de su fallo.

A esos antecedentes se le sumó su actuación en una causa de abuso sexual a una niña. Suárez liberó al imputado porque su abogado no estuvo presente en el momento de la declaración de la víctima, aunque posteriormente ese error fue subsanado y la medida se revirtió, según argumentó su defensora.

Finalmente, en 2015, Suárez fue restablecida en su función tras presentar un recurso de amparo contra el Consejo de la Magistratura, en el que sostenía que el jury que la apartó del cargo había tenido motivaciones políticas, que le adjudicó al jefe comunal de Comodoro.

Se negó a testearse en plena pandemia

En la pandemia, la ex jueza promovió un recurso de amparo para poder visitar a su hija que vive en Caleta Olivia, negándose a hacerse un PCR antes de viajar, requisito exigido en aquel entonces por el gobierno santacruceño. Adujo que no era facultad de un gobierno provincial exigir ese examen por decreto de necesidad y urgencia e hizo una presentación ante la justicia federal.

Su presentación no tuvo éxito porque tres jueces la consideraron inapropiada en medio de una crisis sanitaria como la que se estaba viviendo y no pudo viajar a Caleta Olivia una vez por semana como ella quería.

Por otra parte, en el Servicio Penitenciario donde fue a visitar a “Mai” Bustos cuentan que cuando pasó una hora de visita un guardiacárcel se acercó a la celda para decirle que había pasado mucho tiempo en su visita al preso.

“Soy una jueza, no sea irrespetuoso”, le habría contestado Suárez. Y se quedó un rato más con el condenado con quien además de besos y abrazos, se sacó varias selfies con su celular tal como se ve en los videos de las cámaras de seguridad del penal.

n 2023, su suerte con la justicia pareció cambiar cuando un fallo a su favor hizo lugar al amparo que había presentado por su primera destitución, luego revertida. Así, se ordenó que la provincia de Chubut le pagara de manera retroactiva y actualizada los salarios que no percibió durante los casi dos años en los que se extendió aquella primera sanción.

Ahora, nuevamente, podría sufrir un revés judicial si su conducta finalmente la pone del lado de los acusados penalmente.