La Policía de Buenos Aires se quedará parte de la recaudación solidaria del partido de la Selección por Bahía Blanca

El encuentro solidario organizado por la Selección Argentina y la AFA para colaborar con Bahía Blanca enfrenta en las últimas horas un giro inesperado. Es que según señalaron fuentes oficiales, parte de lo recaudado será retenido por el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, específicamente por el costo del operativo policial desplegado durante el evento.

La decisión, impulsada por la administración de Jorge Macri, equipara el procedimiento de seguridad al de un partido de liga local o competición internacional, generando cuestionamientos sobre el destino final de los fondos. Y no solo eso: poniendo en debate el tema de la empatía, a sabiendas que la mayoría de los participantes (por no decir la totalidad) actuaron ad-honorem.

Según informó la AFA, este lunes se dará a conocer el monto total recaudado, una vez descontados los gastos operativos. La entidad detalló que, además de las entradas vendidas, se considerarán los ingresos por patrocinios y derechos televisivos.

Sin embargo, la factura de la Policía de la Ciudad —cuyo valor aún no se especifica— reducirá la suma destinada al Hospital Penna de Bahía Blanca. Este aspecto ha generado malestar, dado el carácter altruista del evento.

La Policía, en sentido contrario al resto de los involucrados

El estadio de Huracán fue escenario clave: el club cedió sus instalaciones sin costo, mientras que los empleados de UTEDYC renunciaron a su salario por esa jornada. Las televisoras, por su parte, abonaron un canon por transmitir el partido, sumando otro aporte a la causa. Pese a estos esfuerzos colectivos, la deducción del operativo policial opaca parcialmente el gesto solidario.

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Jorge Macri ordenó el operativo de la Policía.

La AFA subrayó en un comunicado que transparentará cada detalle financiero, incluyendo el desglose del pago a la fuerza de seguridad. Este nivel de especificidad busca evitar suspicacias, aunque no elimina las críticas hacia una medida percibida como contradictoria con el espíritu del evento. Mientras tanto, Bahía Blanca espera que la ayuda llegue íntegramente para paliar las necesidades de su hospital.

El debate abre una pregunta incómoda: ¿deben las instituciones públicas cobrar por servicios en actos benéficos? Para muchos, la respuesta es clara: cuando se trata de emergencias, la prioridad debería ser maximizar el apoyo a los afectados. Sin embargo, las regulaciones vigentes permiten a la ciudad recuperar gastos, incluso en contextos altruistas. Esta tensión entre normativa y solidaridad marca un precedente que podría influir en futuras iniciativas similares.

Queda por ver cómo se equilibrarán estas variables este lunes, cuando se revele el monto final. Lo cierto es que, más allá de las controversias, el partido logró movilizar recursos y visibilizar una causa urgente. Un recordatorio de que, incluso en medio de disputas administrativas, el deporte puede ser un puente hacia la empatía colectiva.