El episodio ocurrió en un barrio de la localidad de Guaymallén. Hay cuatro detenidos, uno de ellos con antecedentes. La víctima tenía 10 años.
Conmoción en Mendoza por la muerte de un niño de 10 años que se encontraba en la vereda de su casa de la localidad de Guaymallén. El menor falleció tras recibir un disparo proveniente de un auto gris que merodeaba la zona.
El episodio tuvo lugar alrededor de las 23:20 horas en la intersección de las calles Ferrari y Mortaro de Los Corralitos. Isaías Benjamín Rivas, estaba jugando en la vía pública cuando fue alcanzado por una bala que provino desde un vehículo gris que pasaba por el lugar.
Según consignó el medio local El Sol, tras el impacto, el niño fue trasladado de urgencia al Micro Hospital Puente de Hierro, donde se constató que la bala había entrado y salido por el costado izquierdo del tórax. Debido a la gravedad de las lesiones, tuvieron que derivarlo al Hospital Notti, donde horas después falleció.
Cuatro detenidos acusados de matar al niño
La policía detuvo a tres personas como los presuntos ocupantes del automóvil gris que estuvo en la escena del crimen. Los sospechosos fueron identificados bajo las iniciales F.O.N, de 19 años, que se encontraba en el barrio Evelyn; M.L.F, de 23 años, y una mujer de 25 años, cuyas iniciales son M.M.F.
Además, las autoridades de la Departamental de Guaymallén aprehendieron a un joven de 27 años, identificado como N.P, bajo sospecha de ser el autor del disparo. La detención se llevó a cabo luego de un operativo realizado en el Barrio San Vicente VI, donde reside el acusado. Se trata de un individuo con antecedentes penales por desobediencia y robo simple. Además, tendría vínculos con negocios relacionados con la droga.
Las hipótesis del tiroteo
Los investigadores trabajan en diferentes hipótesis para poder determinar que fue lo que sucedió esa noche. Por un lado, todo parece apuntar a que fue una respuesta a una denuncia realizada por los familiares de la víctima, debido al aumento de la venta de drogas en el barrio donde vivían. Mientras que una segunda línea de investigación, apunta a un conflicto laboral y un posible ajuste de cuentas.
Sin embargo, por el momento todo está en etapa investigativa y esperan avanzar con las indagatorias contra los detenidos para tener más precisiones sobre el caso, como también en los testimoniales para la reconstrucción del hecho.
Mientras tanto, algunos residentes de la zona sostuvieron que se trató de un conflicto por temas laborales. Según testimonios que fueron recopilados por el medio MDZ online, la muerte de Isaías Rivas fue producto de una “venganza”. “Sabemos por qué pasó todo. Hubo un problema en una finca por una tijera de cortar ajo. Hubo una discusión, se pelearon a puño limpio y luego pasó esta desgracia anoche”, relató una mujer al medio provincial.
Al respecto, la mujer explicó que a la hora de trabajar el ajo, “si no tenés tijeras, le tenés que pedir al cuadrillero, que después te la va descontando del sueldo”. El conflicto se habría desatado porque “el chico prestó la tijera, no se la devolvieron y se la descontaron. Entonces fue a reclamar”, lo que desató una pelea y derivó en la muerte del menor.
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