Revuelo en Centenario: se metió en un allanamiento, le pegó una piña a policía Federal y le tiró un piedrazo a otro

Un joven con problemas psiquiátricos y de consumo de Centenario causó un verdadero revuelo al irrumpir en medio de un operativo de la Policía Federal, donde agredió a uno de ellos y luego a otro de la Policía provincial que intervino para frenarlo. Los efectivos sufrieron golpes y cortes y el agresor fue demorado. Los detalles de la secuencia.

En diálogo con LMNeuquén, el comisario Luis Aguirre, jefe de la Comisaría 52, explicó que todo inició alrededor de las 20:15, cuando recibieron un llamado para colaborar con un inconveniente en el barrio Bella Vista II, puntualmente fuera de una vivienda de calles Simón Bolívar y El Salvador.

Es que allí se realizaba un allanamiento, aunque no ordenado por la Justicia provincial.

"Minutos antes, el personal de la División Antinarcóticos Cipolletti de la Policía Federal realizaban un allanamiento en busca de sustancias", confió Aguirre, quien además agregó que por tratarse de organismos que trabajan por separado, no suelen estar al tanto de los procedimientos que realizan en la localidad.

El problema inició cuando, en medio del allanamiento, se hizo presente un joven que pretendía ingresar a la vivienda que se allanaba. Los efectivos de la Federal lo echaron del lugar, pero el joven no quedó contento con esto y regresó a los pocos minutos.

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Omar Novoa

Allí, sin mediar palabra, se acercó a uno de los efectivos y, tomándolo desprevenido, le propinó un golpe de puño al rostro, que le afectó un ojo y le fracturó el tabique.

Este acto desató el caos. Previendo las consecuencias, el joven rápidamente comenzó a alejarse corriendo del operativo, por lo que se dio aviso a la Policía provincial, que logró ubicarlo a un par de cuadras. Sin embargo, el agresor no se rindió.

Al verse rodeado por los policías, comenzó a arrojar piedras y los efectivos utilizaron las escopetas para efectuar algunos disparos disuasivos, en un intento por "intimidarlo". En ese momento, una de las piedras que arrojó el joven alcanzaron a uno de los policías de la Comisaría 52, que sufrió un golpe y corte en el pómulo y una ceja.

Joven problemático

Aguirre indicó que ambos efectivos fueron trasladados al hospital local para recibir las curaciones pertinentes, aunque se trataría afortunadamente de lesiones leves.

Además, el joven, quien se encontraba "muy alterado", fue finalmente demorado y trasladado al hospital de Centenario. El jefe policial indicó que al parecer se encontraba bajo los efectos de sustancias ilegales.

De hecho, se averiguó posteriormente que se trata de un joven vulnerable, paciente ambulatorio de Salud Mental del Natalio Burd, que registra varios ingresos al nosocomio local por problemas de conducta y consumo de droga.

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Por este motivo, aunque se inició una causa por atentado y resistencia a la autoridad, podría determinarse su no imputabilidad. De todas maneras, ya en calma, fue dado de alta este viernes por la mañana y trasladado a la unidad para ser notificado de la investigación iniciada.

Por otro lado, Aguirre confió que la Federal pudo concretar el allanamiento y que habrían secuestrado droga, aunque no se conocen los resultados de la diligencia en detalle. No obstante, se trata de una vivienda que la propia Policía provincial también ha allanado con anterioridad y en la que funcionaría un kiosco narco.

Es por esto que se estima que el joven pueda haber querido acudir a comprar cuando se encontró con el operativo, por lo cual se puso violento.

Operativos en Centenario

En otra línea, Aguirre comentó a LMN que se viene trabajando fuertemente desde principio de año en materia preventiva y es por eso que se han dispuesto patrullajes preventivos durante las noches, que cuentan con la colaboración del Departamento Metropolitana y Antnarcóticos.

Justamente, "a raíz de distintos hechos que se vienen suscitando en jurisdicción de la Comisaría 52", se dispuso un control por el barrio Vista Hermosa esta madrugada, que terminó con la demora de un adolescente armado.

Pasada la medianoche del jueves, en inmediaciones de calles Cuba y Artigas, los efectivos interceptaron a cuatro sospechosos que caminaban por el barrio, lo que llamó la atención de los policías. Por ello, procedieron a identificarlos y, durante el palpado preventivo, se le encontró entre la ropa a uno de ellos un revólver calibre 22.

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El sospechoso era un adolescente, por lo que fue trasladado a comisaría, donde se convocó a su padre y se lo notificó del inicio de una investigación por tenencia ilegal de arma de fuego, además de entregarle la custodia de su hijo. El arma poseía dos cartuchos en su interior, con signos de estar percutados.

En cuanto a los otros tres hombres que acompañaban al adolescente, no fueron demorados por no contar en sistema con ningún tipo de orden de restricción.