Un ladrón sin suerte: robó un auto en Cipolletti y terminó chocando en Neuquén

Un desafortunado ladrón de autos chocó en esta capital y tuvo que abandonar el botín antes de terminar detenido por la Policía neuquina. El hecho fue comprobado esta tarde por personal de las fuerzas de seguridad a la hora de verificar la situación de un Ford, modelo Fiesta.

El llamativo hecho se produjo en el cruce de las calles Chajarí y Peri, cuando dos automovilistas protagonizaron un choque. De acuerdo a la información a la que pudo acceder este medio, el conductor de un Renault Sandero circulaba por Peri en dirección al sur y, otro hombre, que conducía un Fiesta, se dirigía por Chajarí rumbo al oeste.

Mientras el dueño del Sandero se encargó de descender del vehículo y verificar los daños, el conductor del Fiesta mostró una conducta extraña y empezó a alejarse del lugar, a pie.

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Alertados por el incidente, agentes de la Comisaría Tercera concurrieron de inmediato y se encontraron con la llamativa escena de un solo conductor, sorprendido por la actitud del hombre que conducía el Fiesta y que había desaparecido del lugar.

Los cristales no coincidían con el dominio

Como trámite de rigor, el dueño del Sandero presentó su documentación personal y también del vehículo y no se observó ninguna irregularidad. También no tuvo problemas para someterse a un test de alcoholemia, que arrojó resultado negativo.

A esta altura, el personal de la Tercera decidió solicitar el auxilio de sus pares de Tránsito y también el Departamento Sustracción de Automotores. En estas circunstancias, fue que se comprobó el verdadero apuro del conductor del Fiesta y es que se trataba de un delincuente en un auto sustraído. Según datos a los que pudo acceder este medio, el rodado presentaba irregularidades en los números de cristales, que no coincidían con el dominio. Asimismo, se estableció que, según el dominio, había un pedido de secuestro por un vehículo robado en jurisdicción de la ciudad rionegrina de Cipolletti y que el comando de la Regional Quinta de la Policía de la vecina provincia ya había alertado al conjunto de las unidades de la región porque el hecho ocurrió en el transcurso de la jornada de hoy.

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Frente a la irregularidad, el Fiesta fue secuestrado y trasladado por efectivos del Departamento Logística a la sede policial del barrio Progreso.

Delincuentes con aguantaderos en varios puntos

El ocasional secuestro del Fiesta sustraído en Río Negro no hace más que confirmar el aceitado despliegue de las bandas delictivas de la zona que cometen robos en un distrito y buscan atravesar en forma rápida el puente con el fin de camuflar los vehículos, cambiándoles chapas patente y realizando otras adulteraciones en números de motor, chasis y cristales.

Durante los últimos días, también personal de la Comisaría Tercera, recuperó una moto que había sido robada.

De acuerdo a lo informado por las fuerzas de seguridad, el despliegue se inició a partir de que un vecino observó a un sospechoso en una moto que había sido robada. Sin demorarse, el hombre se acercó a efectivos de la Comisaría Tercera en el cruce de las calles Antártida Argentina y Mascardi y los alertó sobre el delincuente.

Con la información aportada por el hombre, los agentes empezaron a patrullar distintas calles y en Castelli, interceptaron al sospechoso.