Violento agredió a su ex pareja y a un amigo de ella: le dictaron una perimetral

Un violento fue acusado por dos hechos en los que agredió y lesionó a su ex pareja y a un amigo de la mujer y quedó acusado. La Justicia le impuso una perimetral, cuyo cumplimiento determinará si se le permite seguir en libertad.

De acuerdo con la teoría del caso detallada en una audiencia el lunes por la asistente letrada Analía García, la fiscalía investiga a "M.E.P" (como se identificó al acusado) por dos hechos de violencia de género cometidos en la ciudad de Neuquén.

El primero fue el 28 de enero de 2025, cuando el acusado llamó por teléfono en varias oportunidades a la víctima, con quien había mantenido una relación de pareja que había finalizado y él no aceptaba. Luego, aproximadamente a las 20:30, "M.E.P" interceptó a la mujer en la vereda de su domicilio.

En esas circunstancias, le cuestionó con quién estaba e intentó sacarle el celular, la agredió físicamente y le provocó lesiones. Después, tomó el celular de la víctima, lo rompió y se retiró del lugar.

El segundo hecho atribuido al imputado ocurrió al día siguiente, el 29 de enero cerca de las 7, cuando el acusado ingresó al domicilio de su ex pareja sin autorización de ella, aprovechando que la mujer abrió la puerta para recibir a su hija.

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En el interior de la vivienda, "M.E.P" se encontró con un amigo de la víctima que estaba haciendo una reparación, lo golpeó y lo dejó tirado en el piso, con sangre en la boca y la nariz. Luego de ello, extrajo un cuchillo, por lo que se produjo un forcejeo entre ambos varones hasta que intervino un vecino.

Por todo esto, los delitos que la fiscalía le imputó al violento son: lesiones leves calificadas por el vínculo y por haber sido cometidas con violencia de género, daño, violación de domicilio y lesiones leves, todo en concurso real y en carácter de autor.

También durante la audiencia, la representante de la unidad fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres, Diversidades y Delitos Sexuales requirió como medida cautelar que el acusado no pueda contactar a la víctima, ni acercarse a la víctima por cuatro meses.

Tras escuchar a las partes, el juez de garantías Juan Guaita, que estuvo a cargo de la audiencia, dio por formulados los cargos de acuerdo a lo solicitado por la fiscalía y fijó el plazo para concluir la investigación en cuatro meses. Además, el magistrado hizo lugar a las medidas cautelares por el mismo plazo y estableció la prohibición de acercamiento y contacto por cualquier medio.

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Violento seguirá detenido

La semana pasada, la Justicia resolvió que un hombre acusado de tentativa de femicidio a su expareja continuará detenido en prisión preventiva por pedido de la unidad fiscal de Violencia contra las Mujeres, Diversidades y Delitos Sexuales. Durante la audiencia, Cecilia Sabatte, la asistente letrada, pidió que la medida se extienda.

Al respecto, manifestó que los riesgos procesales de entorpecimiento de la investigación y del peligro para la integridad de la víctima siguen vigentes. Además, la asistente letrada expresó que fue fijada por la Oficina Judicial la fecha para realizar la audiencia de control de acusación durante la primera semana de mayo.

Los delitos por los cuales se encuentra acusado el varón identificado como J.E.M. son amenazas, lesiones agravadas, privación ilegítima de la libertad agravada, desobediencia a una orden judicial y tentativa de homicidio agravado por haber sido cometido contra su ex pareja y por mediar violencia de género, todo en concurso real y en calidad de autor.

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Los hechos imputados comenzaron el 14 de enero de 2024. Ese mismo día la víctima se encontraba internada en el hospital y "J.E.M." la atacó: le arrancó violentamente el suero que tenía colocado en uno de sus brazos, para luego tomarla del cuello y ejercer presión, generando una "asfixia mecánica parcial". Durante la agresión, la amenazó de muerte y fue interrumpido por personal del hospital que lo retiró del lugar.

El 28 de agosto ocurrió la segunda agresión. Según la investigación del Ministerio Público Fiscal, a las 23:30, el acusado se dirigió a la casa de la víctima en un taxi con intención de que le devolviera un teléfono que había dejado horas antes en la vivienda. Cuando la mujer se acercó a la ventanilla para devolvérselo, el imputado la tomó del brazo y aceleró el vehículo, provocando que ella cayera al suelo, sufriera golpes en sus extremidades y una herida en el rostro.

El 14 de octubre la situación se tornó aún más grave: el imputado volvió a presentarse en la casa de la víctima, quien subió al taxi, y comenzaron a circular por distintas partes de la ciudad. En el trayecto, J.E.M. le suministró bebidas alcohólicas y, en un determinado momento, la agredió verbalmente, le recriminó que le había sido infiel, y no la dejaba irse. Más tarde, un joven que aún no pudo ser identificado subió al vehículo, y la víctima le pidió ayuda, pero ante la indicación del acusado, se bajó del auto.